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ARGENTINA SE METIÓ EN LA FINAL


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La Selección logró el pase a la final goleando 6-1 a Paraguay. Rojo, Di María, en dos oportunidades, Pastore, Agüero e Higuaín marcaron los goles.

Por Noelia Ortmann (@nnoeliaa y Jorgelina Rocca (@JorgelinaRocca)

Paraguay tuvo la primera llegada clara a cargo de su capitán, Roque Santa Cruz, con un remate desviado. En Argentina, Pastore comenzaba a hacerse cargo del juego con una volea que controló el arquero Justo Villar.
Argentina llegó con Lionel Messi en un tiro libre a los 14 minutos. Pastore, junto con el capitán, llevaban las riendas del equipo a través de la velocidad que complicaba a los defensores guaraníes.
En una jugada con Ángel Di María, Derlis González terminó lesionado y obligó a Ramón Díaz a realizar el primer cambio de la noche. Salió el jugador del Basilea y entró Raúl Bobadilla. A los 26 minutos el capitán tuvo un nuevo tiro libre y con una definición de Rojo, Argentina pudo abrir el marcador.
Paraguay sumaba amonestados tratando de frenar al conjunto de Martino. Paulo Da Silva recibió la cuarta amarilla del encuentro. De la misma manera el entrenador seguía moviendo el banco y Lucas Barrios entró por Roque Santa Cruz. La modificación fue clave para la resolución del primer tiempo.
Sobre el cierre Paraguay tuvo dos corners seguidos y a los 42 logró el descuento con un gol de Barrios. Sobre el final, Bobadilla se perdió el empate.
Al minuto de la segunda etapa un pase de Pastore terminó con un gol de Di María, que volvió a darle respiro y a acercar a Argentina a la final. La Selección ratificó su supremacía siete minutos después con una nueva triangulación entre Messi – Pastore – Di María. El jugador del Manchester United puso el 4 a 1 que confirmó al rival de Chile.
Cuando ya estaba todo definido, Agüero marcó su tercer gol en el certamen. Faltando 10 minutos, el goleador del Manchester City salió por Gonzalo Higuaín, que en la primera que tocó pelota logró sellar el 6 a 1.
La final será el sábado a las 17 en el Estadio Nacional. A casi un año de la final contra Alemania, Argentina tiene una nueva chance de romper 22 años de sequía.


Síntesis
Por Antonio Chiozza (@Ito_Chiozza) y Ezequiel Bernard (@EzeBernard14)

Argentina (6): 1-Sergio Romero; 4-Pablo Zabaleta, 15- Martín Demichelis, 17 Nicolás Otamendi y 16-Marcos Rojo; 14-Javier Mascherano, 6-Lucas Biglia y 21-Javier Pastore; 7-Ángel Di María, 10-Lionel Messi y 11-Sergio Agüero.
DT: Gerardo Martino.
Paraguay (1): 1-Justo Villar; 5-Bruno Valdez, 14-Paulo Da Silva, 4-Pablo Aguilar y 2-Iván Piris; 15-Víctor Cáceres, 10-Derlis González y 13-Richard Ortiz; 9-Roque Santa Cruz, 18-Nelson Haedo Valdez y 11-Édgar Benítez.
DT: Ramón Díaz.
Goles: 14m Rojo (ARG), 26m Pastore (ARG), 42m Barrios (PAR), 46m y 52m Di María (ARG), ,79m Agüero (ARG), 82m Higuaín (ARG)
Cambios: 25m 7-Raúl Bobadilla por González (PAR), 29m 8-Lucas Barrios por Santa Cruz (PAR), 55m 21-Oscar Romero por Haedo Valdez (PAR) ,72m 19- Ever Banega por Pastore (ARG), 76m 5- Fernando Gago por Mascherano (ARG), 80m 9-Gonzalo Higuaín por Agüero (ARG)
Amarillas: 11m Rojo (ARG), 12m Biglia (ARG), 12m Cáceres (PAR), 29m Da Silva (PAR), 59m Ortiz (PAR)
Estadio: Municipal Ester Roa Rebolledo (Concepción)
Árbitro: Sandro Ricci (BRA)


Un planteo redondo
Argentina mantuvo la formación 4-3-3 que la llevó a semifinales y fue ampliamente superior a Paraguay. Gerardo Martino propuso, otra vez, su táctica basada en posesión de pelota y presión alta.

Por Juan Manuel Castillo (@manumontana11) y Julieta Miguez (@julietabmiguez)

Durante el primer tiempo, la Selección encontró el orden con la labor de Lucas Biglia y Javier Mascherano, quienes se repartieron la mitad de la cancha. De esta manera, Javier Pastore encontró los espacios para ser el vínculo entre volantes y delanteros. Paraguay, en cambio, esperó con los 11 jugadores en campo propio y buscó salir de contra. El segundo gol del equipo argentino exhibió el buen funcionamiento táctico, tras el gran pase filtrado de Lionel Messi a Pastore y la afinada definición al palo derecho de Justo Villar.
Paraguay se vio obligado a hacer dos cambios, pero que no variaron su planteo inicial. Derlis González y Roque Santa Cruz se retiraron lesionados y fueron reemplazados por Raúl Bobadilla y Lucas Barrios respectivamente. Luego de un aluvión argentino, con mucho toque y agresividad, el conjunto guaraní reaccionó rápido y comenzó a aproximarse al arco de Sergio Romero. En los últimos cinco minutos de la primera parte, los dirigidos por Ramón Díaz complicaron a los zagueros argentinos con el recurso de la pelota aérea. El gol de Lucas Barrios llegó tras un mal despeje de Nicolás Otamendi, que encontró mal parada a la defensa y al arquero Sergio Romero.
Tras el descanso Argentina golpeó rápido y liquidó la semi. Dos tantos de Ángel Di María llevaron la tranquilidad antes de los diez primeros minutos. Paraguay no pudo revertir la situación: no generó una sola chance de peligro y cuando pudo acercarse terminó con dos remates desviados. Con el partido ya definido, Martino cuidó a algunos jugadores amonestados y realizó variantes dentro de los mismos puestos. Ingresaron Fernando Gago y Gonzalo Higuaín por Mascherano y Agüero. El Kun había convertido antes de retirarse y con el ingreso del Pipita se selló la victoria 6-1 y el pase a la final.


Goles


Seguí participando
Con la goleada a Paraguay, el equipo dirigido por Gerardo Martino logró la 18ª victoria sobre los guaraníes en Copa América.

Por Julián Zanatta (@10julianz) y Gabriel Had D’Ippolito

Sólida en los números como lo marca la historia, Argentina reafirmó en el Estadio Municipal de Concepción su paternidad histórica ante Paraguay ya que en el marco de la Copa América ambas selecciones se vieron las caras en 23 ocasiones, en las que hubo 18 triunfos de la celeste y blanca. La historia se completa con cinco empates y ninguna alegría paraguaya.
El 30 de octubre de 1921 fue la primera victoria por 3-0 en el Sudamericano que se disputó en Buenos Aires. Los goles en aquel éxito inicial fueron de Julio Libonatti, Blas Saruppo y Raúl Echeverría. La secuencia de partidos marca otro 6-1, en el Sudamericano disputado en Buenos Aires en 1937. En el Viejo Gasómetro de San Lorenzo, aquel equipo local que finalmente daría la vuelta olímpica celebró con tres de Alberto Zozaya, un par de Alejandro Scopelli y uno de Enrique García; Aurelio González hizo el del honor para los visitantes.
El último encuentro entre ambos equipos fue hace 17 días, en el debut en este torneo, en La Serena. Con goles de Lionel Messi y Sergio Agüero la albiceleste se fue al descanso 2-0 en lo que parecía un trámite sencillo por la escasa agresividad del rival. En la segunda parte, Paraguay aprovechó los espacios en la defensa argentina y rescató un valioso empate con los tantos de Lucas Barrios y Nelson Haedo Valdez. Ahora el trámite fue diferente, fiel a la historia.


Toques de 10 para ser finalista
La Selección vapuleó 6-1 a Paraguay con tres asistencias de Lionel Messi. La Pulga no fue amonestado y disputará la final ante Chile el próximo sábado, desde las 17.

Por Gabriel Ruiz (@gabo_xnz) y Santiago Strods (@SantiagoEzeS)

Lionel Messi sigue sin poder exhibir su poder de fuego en la Copa América (tras el penal del debut lleva más de 415 minutos de sequía), pero mostró sus dotes de asistidor con tres pases gol. Al comienzo, intentó generar juego con Javier Pastore pero quedó encerrado en el tejido guaraní. Su radio de movimiento era el círculo central del campo de juego y le cedió terreno para el desarrollo de Pastore.
En su primera intervención de pelota detenida, a los 14’, envió un centro desde el sector izquierdo del campo rival, que terminó en el punto penal para que Marcos Rojo marcase el primer tanto del cotejo. A partir de allí, se lo notó confiado y más activo para elaborar maniobras individuales.
En 26’ de juego, Lionel recibió la pelota sobre la izquierda, corrió dos metros con ella y volvió a asistir a Pastore, que no perdonó en el mano a mano ante Justo Villar para ampliar la ventaja a dos goles.
A los 30’ y 36’ tuvo dos oportunidades para convertir de tiro libre a menos de diez metros de la medialuna del área, pero ambos disparos se fueron por encima del travesaño.
En el primer minuto de la segunda parte juntó a tres rivales en territorio argentino para abrir la defensa paraguaya, lo que Pastore aprovechó para asistir a Di María, quien puso el 3-1 parcial. A los 52’, Lionel pasó a dos jugadores y dejó clavado al tercero para darle un pase a Pastore, que tapó Villar; el rebote cayó en los pies de Di María para que anotara el cuarto.
A pesar de la ventaja, Messi no bajó los ánimos y buscó su gol. Con la marca encima de un defensor, tuvo su primer mano a mano a los 67’, pero la pelota fue atajada por Villar. Sergio Agüero, de cabeza a los 79’, y Gonzalo Higuain a los 82’, aprovechando una cesión de Messi desde el piso, le dieron cifras definitivas al marcador.


El Tata le arruinó el Díaz
Gerardo Martino vivió muy tranquilo la victoria de su equipo, mientras que Ramón Díaz, fiel a su estilo, lo vio ansioso cerca de la línea del campo.

Por Ignacio Oubiña (@NachoOubina) Joaquín Paz (@NinjaPaz)

Gerardo Martino y Ramón Díaz mantuvieron sus cábalas en la previa del partido. Ambos se presentaron con la misma indumentaria de los partidos anteriores. El Tata siguió con su atuendo deportivo y el extécnico de River Plate se empilchó de saco y camisa. Luego lo suplantó por un camperón debido al frío.
Los técnicos vivieron impacientes los primeros minutos del partido. Estuvieron parados e indicaron permanentemente a sus dirigidos. El Tata pidió a los centrales que se adelantaran, jugaran en línea y tuvieran una recuperación rápida de la pelota. En tanto, el riojano no se quedó atrás. Gritó para acortar distancias entre defensa y mediocampo y así poder explotar el contraataque.

Como de costumbre, el extécnico del Barcelona no gritó ninguno de los seis goles de su seleccionado. Una sonrisa de oreja a oreja valió para felicitar a Marcos Rojo, autor del primero. En los restantes, imitó el estilo de su referente, Marcelo Bielsa. Caminó el corralito de punta a punta sin emitir ningún gesto. En cambio, Ramón festejó tímidamente con un puño al aire el gol de Lucas Barrios. Luego, alentó a sus jugadores para buscar el empate que nunca llegó.
Los gestos de Martino para los árbitros no faltaron. Pese a la victoria, le reprochó decisiones al juez de línea y estuvo, nuevamente, cerca de la expulsión (lo echaron contra Uruguay). Con la derrota consumada, Ramón opto por sentarse en el banco y observar el partido desde allí.


Cuentas claras conservan amistades
Sandro Ricci tuvo un arbitraje correcto en la semifinal entre Argentina y Paraguay y elimino los rumores sobre el rol del arbitraje en la Copa América.

Por Lucas Brunelli (@BrunelliLucas) y Matías Evaristo (@Mevaristo5)

Inicialmente el ecuatoriano Carlos Vera había sido anunciado para impartir justicia en este encuentro, pero finalmente fue electo el árbitro brasileño Sandro Ricci, a quien según Diego Lugano “premiaron por hacer bien los mandados” con la designación luego de no haber apreciado la provocación de Gonzalo Jara a Edison Cavani en el último Chile-Uruguay por los cuartos de final.
“Puede ser que contra Paraguay le saquen amarilla a Leo, Mascherano o Agüero para que se pierdan la final”, había dicho antes del partido el ex delantero del seleccionado uruguayo Javier Chevantón. Sin embargo, lejos de caer en discordias, Ricci controló el partido con autoridad, aunque como debe podría haber sido más severo y mostrarle la segunda amarilla a Víctor Cáceres por un golpe durante una disputa aérea sobre Mascherano en el primer tiempo cuando el destino del partido aún estaba abierto.
Siempre cerca de la jugada y bien ubicado evitó las controversias en un partido en el que Paraguay cometió más infracciones que el equipo del Tata Martino (16 a 11). En un encuentro con cinco amonestados (dos argentinos y tres guaraníes), con el resultado 4-1 en favor de Argentina, el brasileño también exoneró a Marcos Rojo de irse antes al vestuario, durante el segundo tiempo: el lateral del Manchester United, ya amonestado, tomó de la camiseta a Raúl Bobadilla cuando recibía un pase al vacío, de cara al arco argentino.


Afuera por la panza
Ezequiel Garay, actual defensor central en el Zenit de Rusia, se pierde la semifinal ante Paraguay por una gastroenteritis. En su reemplazo Gerardo Martino ubicó en la defensa a Martín Demichelis.

Por Alan Levin (@Alaanlevin)

El rosarino Garay tuvo un mal despertar en la previa al choque en la ciudad chilena de Concepción, con un cuadro de gastroenteritis. Eso le impidió al zaguero estar desde el arranque en el equipo que salió a enfrentar a Paraguay por un lugar en la definición de la Copa América que se celebra en Chile en lo que será su primera ausencia del torneo.
El entrenador Gerardo Martino decidió que su lugar en la zaga central, junto con con Nicolás Otamendi, sea ocupado por Martín Demichelis. El jugador de Manchester City inglés ya había disputado un encuentro desde el arranque, la victoria por 1-0 contra Jamaica con la que se cerró el Grupo B, justamente para evitar que Otamendi sumara su segunda amarilla en la fase clasificatoria y se perdiera el choque de cuartos de final ante Colombia.


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