Este sábado, desde las 10 (hora argentina), comienza un nuevo sueño para la selección argentina ante Islandia por la primera fecha del grupo D en el Mundial Rusia 2018.
Por Santiago Laino
Ya pasaron 25 años de aquella Copa América obtenida en Ecuador. Las tres finales perdidas siguen muy presentes, tanto en el hincha como en los jugadores. El deseo de volver a sumar un nuevo título pasó a ser una necesidad. Este sábado, desde las 10 (hora argentina), comienza un nuevo sueño para la Selección ante Islandia, por la primera fecha del grupo D del Mundial Rusia 2018, con el arbitraje del polaco Szymon Marciniak.
Argentina no llega de la mejor manera. Con las bajas obligadas por lesión de Sergio Romero y Manuel Lanzini, quienes parecían ser titulares inamovibles para Jorge Sampaoli, el técnico se vio obligado a modificar el posible 11 inicial para el debut. Más allá de esto, con la recuperación de Ever Banega, el oriundo de Casilda cuenta con el plantel completo para el sábado.
Luego de la victoria 4-0 frente a Haití, en el último amistoso que disputó la Selección previo al Mundial, Sampaoli declaró que imaginaba un partido similar frente a Islandia. Es por eso que no habrá grandes cambios en el esquema de aquel equipo que goleó en La Bombonera. Argentina buscará encontrar un funcionamiento que se aleje al que venía mostrando tanto en las Eliminatorias como en alguno de los amistosos. Intentará parecerse más al equipo que le ganó a Italia, que a aquel que sufrió la derrota histórica frente a España por 6-1.
Argentina saldrá al Otkrytie Arena moscovita con Wilfredo Caballero; Eduardo Salvio, Nicolás Otamendi, Marcos Rojo y Nicolás Tagliafico; Javier Mascherano y Lucas Biglia; Maximiliano Meza, Lionel Messi y Ángel Di María y Sergio Agüero.
Por su parte, Islandia tendrá su debut absoluto en un Mundial. Cuenta con una camada de jugadores que quedará en la historia ya que en 2016 ingresó por primera vez a la Eurocopa y, en octavos de final, le ganó a Inglaterra para despedirse en cuartos ante Francia. La escuadra de Heimir Hallgrímsson formaría con Hannes Halldorsson; Birkir Már Saevarsson, Ragnar Sigurdsson, Kari Arnasson y Hördur Magnússon; Johan Berg Gudmundsson, Emil Hallfredsson, Aaron Gunnarsson y Birkir Bjarnason; Gylfi Sigurdsson y Alfred Finnbogason. De esos 11, ocho estuvieron en aquel partido histórico frente a los ingleses.
Sus principales figuras son Gylfi Sigurdsson y Aron Gunnarsson. Ambos llegan con poco ritmo debido a que sufrieron lesiones en sus respectivos equipos. El primero juega en el Everton inglés; el segundo se desempeña en el Cardiff galés y es el capitán y emblema de los islandeses.
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