El conflicto entre palestinos e israelíes se remonta a tiempos inmemoriales. La problemática Franja de Gaza ha sido protagonista de numerosos enfrentamientos bélicos. Cómo afecta este conflicto al ámbito deportivo de ambos países.
Por: Javier Felicetti (@JavierFelicetti)
Cuando el hincha prende el televisor, espera ver un espectáculo. ¿Pero qué sucede cuando los problemas cotidianos son tan graves que ocasionan la suspensión de partidos? En Israel, ese es el panorama al que se enfrentan los futbolistas, quienes no están exentos a la explosión de los bombardeos.
El conflicto entre Hamás e Israel no es nuevo. Desde hace años, los medios se ocupan de describir sobre las consecuencias que afectan a la sociedad. Pero, ¿qué hay del deporte? “Los juveniles que ascienden al equipo profesional son todos soldados, hasta la edad de 21 años”, le dice a ETER Guillermo Israilevich, jugador que milita actualmente en Boca Unidos, pero que formó parte de diversos planteles en aquel país, e incluso jugó en su Selección. El mediocampista arribó a Haifa en 2002. Ya en ese entonces había conflictos: “Yo llegué cuando era la época de los atentados en los colectivos, restaurantes, etcétera. Inclusive en un restaurante al que yo iba a comer con la familia un día hicieron un simulacro. Y una vuelta un bus explotó a cinco cuadras de casa, mientras yo tomaba mates con mi señora”.
El día a día de un profesional ya es complicado con el entrenamiento, con pelear la posición o ponerse a punto físicamente.
En Ashkelon, ciudad de Israel, en medio de un entrenamiento sonaron las sirenas y tuvieron que suspender la práctica, como le cuenta a este medio Julián Wajsztejn, actual volante del Napoli. Pese a estar en Italia, “El Pulpo” aún sufre las consecuencias. Aunque no haya cambiado el trato de sus compañeros en lo deportivo, sí ocurre en lo cotidiano, y no por haberse desempeñado allí, sino por el mero hecho de ser judío: “En un bar, o en una cena con amigos, alguno que no te conoce tira algún comentario en contra de Israel… Hay gente que habla sin saber, y eso me pone nervioso”.
Israilevich también fue víctima del conflicto en otros lados. Según recuerda, cuando le tocaba jugar por competencias europeas, en ocasiones había banderas palestinas o carteles con insultos.
El conflicto tampoco deja exentos a futbolistas de Palestina. Pablo Abdala, que jugó en la Selección de ese país, es un claro ejemplo: “Yo nunca estuve en Palestina. Concentrábamos en Kuwait o en Egipto, a 50 kilómetros de El Cairo”, afirma el ex volante, debido a los constantes problemas bélicos. Entre sus experiencias, el rosarino recuerda que en 2004 la mujer de uno de sus compañeros lo llamó para decirle que la casa había sido destruida por un tanque israelí.
Pese a que Abdala cree que lo que sucede no es una guerra, sino una lucha desigual, tampoco está de acuerdo con las ideas de Hamás, grupo yihadista islámico.
Wajsztejn, en cambio, afirma que Hamás hace un gran uso de la prensa para vender la imagen del más débil. “…nadie habla que en medio de la tregua caen 10 cohetes al día en Israel. Israel recauda dinero para Palestina y ellos lo usan para bombardear”.
Si a todos estos problemas diarios, uno les suma el hecho de que tanto Israilevich como Wajsztejn tienen familia que vive en la región, el día a día de ellos se vuelve aún peor. Y es que constantemente están preocupados por lo que pueda suceder a miles de kilómetros. Pese a todo, ambos aseguran que los años que estuvieron en el país fueron de los mejores de sus carreras y no dudan en querer volver.
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Tanto el fútbol como el tenis son los deportes que más se vieron afectados hasta ahora por este suceso que ya dejó miles de muertos.
Por: Luciano Avalle (@lucianoavalle)
La temporada número 65 de liga de fútbol de Israel y la décima quinta edición desde que se llama Liga Premier no dio comienzo todavía debido al enfrentamiento militar en la franja de Gaza, al oeste de Israel. Ciudades como Tel Aviv, Ashdod, Beersheva y Rishon Letziyon son blancos fijos de los ataques aéreos de Hamas, pese a que normalmente los misiles no tocan suelo. Por esto, la Asociación Israelí de Fútbol (IFA) suspendió los partidos amistosos en el sur, por ser una de las zonas más afectadas.
“Debido a la situación actual, en términos de seguridad, ningún partido de competencias organizada por la UEFA se puede disputar en dicho país, hasta nueva orden”, fueron las palabras del comité de la Unión Europea de Fútbol Asociado.
De este modo, los equipos israelíes que se hayan clasificado a la Champions League y a la Europa League tendrán que buscar otros países para poder disputar sus partidos de local. La Selección de Israel también se ve afectada porque tiene que disputar las eliminatorias para la Eurocopa de Francia 2016. La FIFA está haciendo todo lo posible para que el encuentro contra Bélgica que se jugará en el norte, en Ramat Gan, no se suspenda.
El tenis también se vio perjudicado por el conflicto y la Asociación de Tenistas Profesionales decidió suspender el ATP 250 en Tel Aviv, que iba a disputarse entre del 15 al 21 de septiembre.
El presidente de la Asociación, Chris Kermode, por medio de la página web oficial dejó en claro: “Nuestra máxima prioridad es asegurar la seguridad de nuestros jugadores, espectadores y todos los involucrados en organizar un torneo. Esperamos estar en Tel Aviv el próximo año”.
A su vez, la serie por el repechaje de la Copa Davis entre Israel y Argentina que debía jugarse en Tel Aviv del 12 al 14 de septiembre finalmente se disputará en Sunrise, Florida (Estados Unidos).
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