Una nochecita del 2015, mientras la Selección Argentina de vóley celebraba el oro logrado en Toronto ante Brasil, Diego Armando Maradona sorprendió con un llamado emocionante a Hugo Conte. Lo recordamos…
Este mes se están desarrollando los Juegos Deportivos Panamericanos en Santiago de Chile y este mes también se celebra el natalicio del más grande, Diego Armando Maradona. Uno de los últimos grandes vínculos del Diez y los Juegos se dio en 2015, luego de la obtención de la medalla dorada de la Selección Argentina de voleibol.
Argentina y Brasil se encontraron en la final del torneo desarrollado en Toronto, Canadá. Fue el domingo 26 de julio justo en la previa de la ceremonia de clausura. El rating de ese partido fue muy grande: por el día, por el horario, porque no había algo más importante a nivel deporte, por lo que estaba en juego y por los rivales, claro.
Ya se habían cruzado en la fase de grupos, partido que Brasil había ganado sin mayores inconvenientes por 3-0. Pero esta vez, y con el oro en disputa, la cuestión iba a ser diferente. La Albiceleste, dirigida por Julio Velasco, jugó a un altísimo nivel ante los, en ese momento, subcampeones del mundo. Como lo que sucedió seis años después en la capital japonesa en los Juegos Olímpicos, Argentina la ganó a su par brasileño en un tie break memorable, después de remontar una desventaja de dos sets a uno. Los parciales de la victoria fueron 25-23, 18-25, 19-25, 25-23 y 15-8.
En ese momento, luego de la histórica victoria y ante la sorpresa de todos, Maradona llamó a la transmisión de TyC Sports, en la que José Montesano y Hugo Conte, ídolo del vóley y padre de Facundo (había sido titular en Toronto), relataban y se emocionaban con lo ocurrido. Atendieron y escucharon sorprendidos a un Diego que, como siempre, seguía los acontecimientos del deporte nacional, dándole su apoyo incondicional a cualquiera que vistiera la celeste y blanca con orgullo. Lo hizo mil veces con el fútbol: recordamos el día del 0-5 ante Colombia con Claudia y él en la platea, en el Mundial de Alemania 2006, en el mundial de Rusia contra Nigeria, muchas veces en la Copa Davis, alentando al básquet, a las Leonas…
“Quiero transmitirles a todos los muchachos mi emoción, mi cariño y que nosotros por ahí hace un montón de tiempo que no ganamos en fútbol, pero ganar esa medalla de oro es como ganar una Copa del Mundo. Porque nosotros los argentinos les debemos el coraje y los huevos que pusieron los chicos argentinos”, dijo el astro argentino. Para luego dirigirse directamente a su amigo Hugo Conte: “Amigo, ahora tenés que ir a busca los premios de tu hijo y eso es maravilloso”. Y siguió el diálogo entre el Diez y Hugo Conte.
Diego: “Cada tanto argentino era la vida acá en mi casa, como lo va a ser siempre hasta el día que me muera. Te felicito a vos por tu hijo, a la Selección, a Velasco que lo conozco porque los hizo grande a los tanos. Les hizo entender lo que era el vóley. Hay un montón de cosas que te las quería decir y estoy orgulloso de que hoy, que para Brasil era un trámite, Argentina lo haya pasado por arriba”.
Hugo: “Uf… es muy fuerte lo que decís. Sos el único deportista que me hizo llorar viéndote adentro de la cancha. Sos lo más grande del mundo, siempre. La verdad, no tengo palabras para agradecerte este momento”.
Diego: “Lo único que te digo Huguito es que sos mi amigo eterno, que tu hijo tiene a quién salir, que es un hijo e’ tigre de verdad y que tenés que estar orgulloso, pero recontra orgulloso de lo que hace tu hijo adentro de la cancha con la camiseta argentina., Porque ese también, como vos, la tiene tatuada. No se la pone cada vez que va a jugar, la tiene ya tatuada. Los dos la tienen tatuada. ¿Okey?”.
Hugo: “Gracias, Diego. Simplemente gracias, por todo, por la vida que hiciste dentro del deporte, por lo que nos diste a todos y por lo que nos hiciste sentir toda la vida. Gracias, de corazón”.
Fue una nochecita especial, con la emoción por el clásico triunfo y por las palabras del astro. Hoy que se juegan los Panamericanos y que estamos cerca del cumple de Diego, valía la pena recordar a los dos sietes, de los Conte, y al diez de Diego: lindos números para este suple.
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