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LA PERSPECTIVA DE GÉNERO EN EL MOVIMIENTO OLÍMPICO


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Para Gerardo Werthein, presidente del Comité Olímpico Argentino, los YOG 2018 cerrarán la grieta en términos de género. Sin embargo, la máxima entidad del olimpismo argentino destila diferencias entre hombres y mujeres en todas sus filas.

Por Roi Waremkraut

Dentro de su Agenda 2020, que traza el camino del olimpismo de cara al futuro, el Comité Olímpico Internacional (COI) anunció en agosto de 2015 que los Juegos organizados en Buenos Aires 2018 serían los primeros en la historia en guiarse por los preceptos de la igualdad de género.

El argumento fundamental para sostener esta afirmación es el hecho de que en dicha competición, que se desarrollará en la ciudad porteña entre el 6 y el 18 de octubre, participarán la misma cantidad de deportistas hombres y mujeres, pertenecientes a 206 países. Adicionalmente, habrá más de 1400 actividades educativas y culturales previstas en los cuatro parques Olímpicos de la Juventud con el objetivo de difundir y debatir la perspectiva de género en el deporte.

Durante la ceremonia de encendido de la llama olímpica en Atenas durante el mes de julio, el presidente del Comité Olímpico Argentino (COA), del Comité Organizador de los JOJ 2018 (COJOJ 2018) y miembro del COI, Gerardo Werthein, expresó: “Estamos orgullosos de nuestros Juegos. Ayudarán a que el COI guíe al Movimiento Olímpico hacia nuevos horizontes. Buenos Aires 2018 será la primera competencia Olímpica con igualdad de género. Gracias a mis colegas del COI, de las Federaciones Internacionales y de los Comités Olímpicos Nacionales, la tercera edición de los Juegos Olímpicos de la Juventud de verano hará historia por haber cerrado la grieta en términos de género”.

Sin embargo, para “cerrar la grieta en términos de género”, queda pendiente una revisión a nivel dirigencial, ya que los que toman las decisiones son, en su gran mayoría, hombres. También basta con ver la cantidad de entrenadoras, médicas, árbitras y otras funciones presentes en los Juegos Olímpicos para darse cuenta que las diferencias de género aún están presentes.

“A los dirigentes políticos varones, en todos los ámbitos, les cuesta reconocer los privilegios que tienen con respecto a las mujeres y cuestionarlos. La paridad en la cantidad de hombres y mujeres que competirán en los Juegos seguramente es un avance, pero queda mucho camino por recorrer para llegar a la igualdad de género en el deporte”, comentó Victoria Freire, referente de Mala Junta y del Movimiento Feminista en Argentina. Para reforzar esta idea, Analía Fernández Fuks, periodista del portal feminista LatFem, agregó: “El deporte es un reducto muy machista y patriarcal aún. Los cargos ejecutivos y directivos están reservados a los varones”.

El COI tuvo nueve presidentes en su historia y todos ellos fueron hombres, incluido el mandatario actual, el alemán Thomas Bach; y de los 96 miembros que representan al organismo en sus respectivos países, solamente 28 son mujeres (menos del 30%).

Algo parecido pasa en el COA, que tuvo solamente una presidenta en su historia y fue únicamente por un periodo de dos años (2008-2009). Se trata de Alicia Masoni de Morea, quien hoy es la vicepresidenta primera de la institución. Además, es miembro permanente de la Mesa Directiva, que posee once integrantes, siendo ella la única mujer.

A principios de 2017, el COI inició un proceso de revisión del estado de la igualdad de género en el Movimiento Olímpico, del cual surgieron 25 propuestas con el objetivo de mejorar este asunto en áreas específicas: deportes, imagen, financiamiento, gobernanza, recursos humanos, monitoreo y comunicación. Éstas fueron aprobadas por el Comité Ejecutivo, lo cual reconoce la necesidad de profundizar las medidas más allá de la igualdad en la cantidad de deportistas.

Tanto el COA como el resto de los CON deberán adoptar medidas para reconocer las diferencias de género al interior de sus propias organizaciones, reflexionar sobre la situación de las mujeres en cada uno de los países y transformar una realidad injusta y desigual.


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