“Fuera Osorio”, gritaron un grupo de simpatizantes mexicanos en el Estadio Azteca, después de que su equipo le ganara por 1-0 a Escocia en el partido despedida en la previa al Mundial. El entrenador estaba cuestionado desde la eliminación en la Copa Centenario tras perder 7-0 con Chile. Hoy México se clasificó segundo, con sufrimiento, a pesar de su derrota por 3-0 contra Suecia, porque Corea Del Sur superó a Alemania, último campeón del mundo, por 2-0.
Por Lucas Carballo y Evelyn Taverna
Detrás de la línea de cal, Juan Carlos Osorio, no dejó de moverse durante los 90 minutos, al igual que en los dos anteriores partidos que disputó. Contra Suecia arengó a sus jugadores cuando los europeos se pusieron arriba en el marcador. En el piso estuvo tirada su clásica libreta junto a sus lapiceras azul y roja, donde anota cada detalle que sucede. Por ambas cosas se lo criticó, aunque principalmente por su manera de vivir el fútbol.
El director técnico realizó una de las mejores eliminatorias y clasificó primero de la CONCACAF para el Mundial de Rusia, después de veinte años. Otra de las críticas que se le hacía es las variantes constantes en sus equipos. Contra Suecia, después de 51 partidos sin hacerlo, repitió la misma formación que había puesto contra Corea Del Sur.
Con su trabajo, acompañado de los resultados, logró cambiar su imagen negativa con los hinchas. Aunque la derrota por 3-0 contra Suecia les dejó un sabor amargo, el pase a los octavos de final con seis puntos entre ellos el triunfo con Alemania, no le resta mérito al entrenador. Después del triunfo contra los asiáticos por 2-0, el pueblo mexicano demostró su apoyo y confianza coreando su nombre en el Arena Rostov.
Con vistas al futuro, la Selección de México buscará romper el maleficio y poder jugar en cuartos de final, que no lo logra desde 1986 en el Mundial organizado en su propio país. Todavía espera por su rival, pero con el “Profe” Osorio a la cabeza los hinchas vuelven a creer que es posible disputar el famoso quinto partido.
Agregar comentario