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“Tener al Papu de mi lado fue contar con el as de espadas”


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Martín Reich, periodista deportivo multifacético, habló sobre su vida laboral en cuarentena. A sus 37 años emprende nuevos proyectos, entre ellos, la creación de “Libres de Humo”, un podcast junto Alejandro Darío “Papu” Gómez.

Por Nicolás Bombachi

Remera negra y se podría decir que talle S. Fondo de color blanco y un poco despeinado, pero portando de la mejor manera sus 60 kilos. Su voz al expresarse refleja la calma con la que lleva su vida y su profesión, y sus pausas reflejan la edad de su hija que, con suma inocencia, busca intervenir delante de la cámara.

“La pandemia fue un golpazo para todos”, contaba a la vez que mencionaba el dolor que significó el final de programa radial conducido por Miguel Granados y Martin Garabal, del cual formaba parte desde dentro hace más de dos años y como espectador desde mucho antes, “fue un palazo”, agregó. 

¿Cómo afectó la pandemia a tu trabajo?

– Si puedo sacar algo positivo, en mi laburo, es que terminó siendo bueno. Hice un podcast con el Papu Gómez, que en su momento estaba en el Atalanta (Italia) ahora en el Sevilla (España) y en la selección Argentina, a la distancia, él desde su casa en Bérgamo y yo en Buenos Aires. Siempre entrevistamos alguna celebridad, futbolista, ex-futbolista, del básquet, del tenis, del medio en general como Mario Pergolini o el DJ Hernán Cattaneo. Hicimos cerca de 28 notas y estuvo hermoso. Hice una especie de terapia y a mí me ayudó a posicionarme en el periodismo, porque llamaba la atención el podcast con un futbolista activo y de élite.

¿Cómo fue cambiar de trabajo en medio de la pandemia? ¿Fue difícil pasar de un laburo más desestructurado como lo era “Últimos Cartuchos” a uno con un formato más rígido?

– Nos dolió a todos. Porque los pocos años que estuvo fueron muy felices. Como oyente y después siendo parte del programa. Con los chicos tengo muy buena onda, con Migue ya era amigo de antes, fue un mazazo. Después empecé a hacer radio, en Congo, con Clemente Cancela. No fue tan drástico porque dentro de todo también hago mis chistes, tengo mis libertades para hacer un programa divertido.

Si bien extraña los “chistes de Migue y Martín”, en Congo, radio en la que trabaja actualmente, encontró un formato que no representaba un cambio tan drástico, ya que “dentro de todo puede ser él y hacer sus pavadas al aire”. “Tengo mis libertades para hacer un programa divertido”, dijo entre risas antes de rematar con: “No me pasé a política”.

¿Cómo surgió la idea de hacer un podcast con “el Papu” ?, ¿Es complicada esa relación laboral a distancia?

– La idea de grabar con él se me ocurrió escuchando algunos podcasts. El de Nico Laprovittola y Germán Beder que se llama “Hola que tal”, que es con muchos invitados del básquet y también entrevistados como Adrián Paenza o Sebastián Wainraich. Se me cruzó por la cabeza, venía hablando con Papu que tengo muy buena relación y que él allá en Bérgamo tenía mucho tiempo libre por la pandemia, le tiré la idea y le encantó. Se hizo una amistad a distancia. No fue difícil, nos conectábamos por Zoom y un editor operador de Congo grababa las charlas con el invitado. Todas iban de corrido, solamente las editaban un poco por las voces, para agregarle algún efecto o relato de gol. Todos los viernes sacábamos una charla nueva. Ahora que lo pienso fue increíble porque todos los viernes cumplíamos con que haya un capítulo. (De fondo se escuchaba la dulce voz de Lupe, su hija, con intenciones de jugar con él).

¿Cuál es tu episodio preferido de Libres de Humo?

– Los disfruté mucho todos. Pero el de Maxi López me gustó mucho. A quién yo no conocía, sino que era amigo de “Papu”, de hecho, lo produjo él. Nos dijo cosas que están muy buenas. Para salir del deporte, el de Mario Pergolini. Estuvo bueno cómo se abrió él, la buena onda que nos tiró y contó algunas cosas que nunca contó, por ejemplo, cuando presentó al Indio Solari con Juan Román Riquelme. Hablamos también de los medios en general, cuando siendo joven se hizo muy conocido. Nos dimos lujos como que esté Iván Zamorano (ex futbolista de Real Madrid e Inter de Milán) o Vicente Del Bosque (ex DT y campeón con la selección española de fútbol en Sudáfrica 2010).

– ¿Es más o menos complicado conseguir un invitado en cuarentena?

– Fue un poco más fácil, la gente tenía un poco más de tiempo. Si estaban todos muy podridos del Instagram Live, pero como la propuesta que le hacíamos era una charla de unos 40 minutos o 45, era muy distendida desde donde estén. Tenía a favor el as de espada que era tener al “Papu” conmigo. Mucha gente no le molestaba estar o hasta tenía ganas de preguntarle algo que justo estaba jugando Champions con Atalanta.

En tu rol de periodista deportivo, ¿cómo viviste la muerte de Maradona?

Lo de Diego me pegó, me cayó un poco más tarde la ficha que en el mismo día porque también tengo una amistad con Dalma Maradona. Entonces sabía que venía mal, que no hablaba con él por el entorno de Matías Morla y demás, no tenía el teléfono de su papá. Eso me puso muy triste por ella. Después, como futbolero, era una locura todo lo que hacía y lo que hizo Diego.

¿Cuál es tu opinión con respecto a la movilización masiva que aquello desencadenó?

– Por lo que Diego significó, no me sorprendió. Momento de pandemia y como estábamos, obviamente que no estuvo bien. Primero la salud de la gente y después todo lo demás. Pero sí que no me sorprendió mucho por las cosas que Maradona generaba, acá y en la India”.

– Buscar información de deportes que a Migue Granados y Martín Garabal les interese, te resultaba un desafío, ¿qué desafíos encontrás hoy en día en tus proyectos actuales?

– Fue un lindo desafío, al estar ellos totalmente desinformados y desinteresados del deporte, tenía que ir a buscar una vuelta para que les interese lo que yo les contaba. Ahora volví a lugares donde la gente que le cuento sobre el deporte está más empapada como Clemente Cancela, Gabriel Schultz, Dalma Maradona, Nicolás Cayetano y Julieta Cayetina. Estoy a la tarde con Jay Mammón, que es humorista y cero deportes, es un caso parecido al de Migue Granados y ahí vuelvo un poco más al Martín de Últimos Cartuchos. A buscar datos un poco más coloridos, como Cristiano Ronaldo arregló sus dientes en el tiempo y se fue tuneando. Porque un futbolista compró un colchón por 35 mil euros para descansar más. Voy buscando y mechando entre la actualidad y esos datos para poder, según la mesa de radio, cumplir con la información.


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