Inicio » “Al youtuber lo elige la gente”

“Al youtuber lo elige la gente”


Compartir

Franko Bonetto, de  41 años, habla sobre su experiencia como youtuber y da su punto de vista sobre la “grieta” entre los nuevos generadores de contenidos y los periodistas deportivos.


Franko Bonetto (FRANKUCHO), en su cuarto de grabación.

River y Banfield juegan en el estadio Florencio Sola, en el Sur del Conurbano Bonaerense. Al mismo tiempo, desde Arroyito, Provincia de Córdoba, en un cuarto color verde oscuro, una bandera que dice “Loko por River” se muestra colgada en un estante. También se observan una camiseta y un adorno en forma del escudo del equipo millonario. Un hombre con su hijo reaccionan al partido en vivo transmitiendo en su canal de Twitch, con casi 7 mil suscriptores. Es Franko Bonetto, quien desde 2013 reacciona a todos los partidos del club de sus amores, River Plate.

“Siempre me decían que estaba re loco por cómo miro los partidos, y me dijeron que algún día me tenía que grabar”, recuerda Franco, que tiene casi 300 mil suscriptores en su canal FRANKO BONETTO (YouTube), y 74 mil seguidores en su cuenta de Instagram (@frankucho79). Sus comienzos se remontan al Mundial de fútbol Sudáfrica 2010, donde se grabó festejando el gol de Gabriel Heinze a Nigeria.  “Ese video lo levantó un programa de Pettinato por la noche en América, y fue una sorpresa porque en esos tiempos, hace 10 años, Youtube no era lo mismo que ahora”, comenta.

Sus videoreacciones a los partidos de River comenzaron a inicios de 2013, en un partido de verano donde el equipo de Nuñez le ganó a Boca por 1 a 0. “De a poquito empecé a seguir grabando, hasta que llegó el gol de Funes Mori a Boca en 2014, que fue uno de los vídeos que más impacto tuvo porque casi me cago muriendo”, relata Bonetto, y agrega que llegó hasta las manos de los dirigentes del club. “Después tuve la posibilidad de estar con los jugadores y conocer a Francescoli, que era mi máximo ídolo”. A partir de ese video, el cordobés se grabaría viendo todos los encuentros del millonario. Yo creo que tuvo repercusión porque la gente del interior se sintió identificada conmigo”, concluye.

Bonetto, que además es director de la radio “Arroyito y el mundo”, comenta que su entrada en el mundo de Youtube fue algo casual, pero que lo disfruta mucho. “Es algo absolutamente sano que lo puedes hacer en casa con tu familia”, señala. Franko tiene 3 hijos: Pia, quien es hincha de Boca, Alma y Matías. Los tres han aparecido en sus videos, así como también su nieta Isa y su madre, entre otros familiares. “Sigo siendo el mismo chico que fui a los 18 años, pero con 41. Con más responsabilidades pero tratando de nunca perder esa esencia”, afirma. La plataforma de Google, también le abrió la posibilidad de relacionarse con otros creadores de contenido, como “Los Displicentes”, a quienes conoció en Brasil durante un viaje en 2019. “Creamos una linda comunidad con muy buena onda y ayudándonos sin tener un compromiso o interés”, aclara.

Franko Bonetto y su hija Pía, grabando el Superclásico.

-¿Tenés alguna anécdota con algún jugador de River?

Si, fue muy flashero. Me pasó cuando Julián Álvarez, que es de acá de Calchín muy cerca de Arroyito, vino después de salir campeón de la Copa Libertadores en 2018. Hicieron una caravana en su ciudad, que es mucho más chica que acá. Entonces cuando me dijeron que pasaba eso, vino un amigo y me dijo “Vamos que va a venir Julián”, y fuimos. Vino un muchacho, y me dijo “Vos entra a la cancha, ahí a donde va a estar Julian porque te conoce…” y bueno, entro y cuando lo encaro, el viene y me dice “¡Uy Frankucho!¿Qué haces?”… Me dije para chabón que pasa acá. Yo no sabía, no estaba muy seguro de que los jugadores vieran mis videos. Si la gente pero los jugadores… digo para colmo me saluda de verdad, me abraza, hay un vídeo que está subido a mi canal de YouTube de ese momento, y me dice “Cómo te cagaste la otra vez cuando fui a patear penal”, claro había pateado el penal contra Gimnasia que quedamos eliminados de la Copa Argentina. Y entonces ahí me prestó la medalla real loco… la medalla que habían ganado en Madrid… y me saqué una foto. Ahí me di cuenta que los jugadores miraban mis videos. Me paso con Pinola. He tenido momentos donde explotaba todo y también momentos de meseta… cómo todo.

Franko Bonetto con la medalla que le prestó Julián Álvarez.

Ser conocido por miles de personas en El Monumental, conocer a jugadores del club, que estos vean sus videos es, como dice Franko, algo “flashero”. Pero también implica exponerse a críticas negativas, y más si hablamos de algo tan popular y pasional cómo el fútbol. Los nuevos “influencers” se han ido adaptando, teniendo que soportar chicanas de algunos periodistas deportivos de la pantalla chica.

-¿Existe envidia entre periodistas e influencers/youtubers?

-Claro que sí. Entre la vieja escuela de televisión y los youtubers, no me cabe la menor duda de que no les debe gustar para nada. La diferencia está en que el youtuber como a cualquier influencer lo elige la gente, la gente elige verte, vos elegís verme a mí. Yo no impongo mi imagen como en la televisión que se impone a una persona. Lo agarran y lo ponen a “fulanito de tal” al frente de un programa deportivo, un programa que vos sabés que mucha gente ya consume, entonces inevitablemente lo vas a ver pero no por el contenido, sino por la persona que está haciendo el programa. En cambio a los youtubers los van a seguir por lo que son, y si no, siguen a otro y está genial. Creo que eso molesta y hay una grieta ahí.

-¿Y qué te genera, en el caso de las videoreacciones, cuando los acusan de actuar en los vídeos, o que digan que el trabajo de un youtuber no es un trabajo “real”?

-Da bronca porque me tildan de exagerado, y ha pasado y pasa de que creen que los youtubers nos estamos rascando las bolas mientras estamos haciendo plata y plata y millones, cosa que tampoco pasa. Tengo mi trabajo también. Algunos viven de eso, a veces ganan menos y a veces mucho más. Yo estoy sólo editando, y hay otros youtubers que tienen editores y me parece genial. Imagínate que terminó el partido de Boca, después de terminar de editarlo, hago las miniaturas, y tenía que cocinar para mi hijo, al ratito empezaba River. Entonces me hubiese encantado hacer las 13 horas seguidas que me pedían, pero si fuera streamer si te meto las 13 horas todo en vivo y listo tengo 5000 personas que me están viendo durante las 13 horas y le metemos, pero yo soy youtuber, y tengo que armar las cosas para YouTube.

Más allá de cualquier polémica, Franko disfruta,  y eso es lo que genera la buena onda en cada video. Al fin y al cabo, se trata de divertirse, de pasar un rato en familia o con amigos, de gritar un gol y darse un abrazo eterno. “El día que no me divierta haciéndolo, no lo hago más”, concluye.


Compartir