Por la octava fecha de las Eliminatorias rumbo al Mundial de Rusia 2018, en el segundo partido de Edgardo Bauza como entrenador, la Selección no dejó una buena imagen en Venezuela pero igual rescató un punto. El Patón cambió de esquema y apostó a tres volantes con características defensivas (Javier Mascherano, Lucas Biglia y Ever Banega) ante la ausencia de Lionel Messi. Las pocas ideas para atacar dejaron en evidencia a Pablo Zabaleta y Marcos Rojo, quienes no lograron darle una buena terminación a sus excursiones ofensivas. Además, las diagonales de Ángel Di María y el pivoteo de Lucas Pratto no fueron suficientes ante la falta de compañía en los últimos metros de la cancha.
La zaga central argentina constituida por Nicolás Otamendi y Ramiro Funes Mori no mostró la solidez de partidos anteriores. El defensor de Manchester City se mostró nervioso y terminó pagando con tarjeta amarilla sus salidas lejos del área. Las subidas de los marcadores de punta abrieron al mediocampo nacional y forzaron a Javier Mascherano y Lucas Biglia a intentar en vano cubrir todo el ancho de la cancha. Así, el equipo se retrasó y terminó encontrándose en desventaja por una desatención defensiva.
En el segundo tiempo, Argentina mantuvo la misma táctica. Los nervios de Otamendi y la falta de juego desembocaron en el segundo grito venezolano. Sin tanta creación, apareció Lamela filtrando un pase en el área rival para que Pratto, con un poco de fortuna, convirtiera el descuento. La Vinotinto se replegó para defender la ventaja y Bauza aprovechó para mover el banco: ingresaron Ángel Correa, Lucas Alario y Nicolás Gaitán por Lamela, Biglia y Rojo. De esta manera, el equipo quedó partido en dos, uno defendiendo y otro atacando. Así y todo, el equipo de Bauza no logró claridad en los últimos y fue solo gracias a la pelota parada que encontró el empate en la arremetida de Otamendi.
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