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LA JOVEN QUE DEJÓ LA GIMNASIA PARA LEVANTAR 100 KILOS


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Sasha Nievas nació para ser deportista. En la escuela primaria empezó a practicar gimnasia artística, pero luego de seis años la cambió por la halterofilia, nombre técnico del levantamiento de pesas. Con sólo 16 años, ya se colgó una medalla de bronce en los pasados Juegos Olímpicos de la Juventud.

Por María Florencia García | @florgarciad

foto sasha 1

Karate, tenis, atletismo, gimnasia y natación fueron algunos de los deportes por los que pasó Sasha Nievas antes de ser pesista. “Era una persona muy cambiante y me gustaba siempre practicar algo nuevo”, le explicó Sasha a ETER Digital. Sin embargo, la joven de 16 años hace tres que optó por la disciplina que la llevó a los últimos Juegos Olímpicos de la Juventud en Nanjing, China, en agosto pasado.

Luego de seis años de practicar gimnasia artística y notar que no progresaba, la idea de incursionar en otro deporte comenzó a rebotar en su cabeza. En realidad, todo empezó cuando su papá, Edgardo, decidió ir al gimnasio para hacer musculación y vio que en el mismo club hacían levantamiento de pesas. Fue ahí, en el Patinódromo de Mar del Plata, donde Nievas se fue a probar y a jugar con los palitos.

El primer formador de Nievas fue Matías Bernatene, quien la entrenó los primeros dos años de su carrera. Sin embargo, en la actualidad, la marplatense llega al gimnasio alrededor de las 8.30 y se encuentra con Sofía Cadona y Lisandro Digiuni, sus entrenadores. Ellos la esperan con una entrada en calor y luego realizan una serie de ejercicios de arranque y envión, que son los movimientos básicos del deporte.

Una vez terminado el entretenimiento, almuerza para ir por la tarde al colegio, donde cursa quinto año. En la escuela están todas sus amigas que, cada vez que tienen la posibilidad de verla levantar pesas, la miran sorprendidas. “Son las mismas que hace diez años iban a la primaria conmigo”, contó Sasha.

También cuenta con el apoyo de su hermano Francisco, a quien considera su mano derecha, ya que al dedicarse al karate (fue campeón Panamericano en Rio 2007) pasó por las mismas situaciones de competencia que ella.

Su madre, Claudia, no quería que la menor de la familia levante pesas porque, al ser chica, decía que “se le iba a deformar la columna o iba a quedar enana”, detalló Sasha, entre risas. Sin embargo, con el tiempo, la mamá se dio cuenta de que a su hija le estaba yendo bien y progresaba. Entonces, cambió su opinión.

Sasha ya no es una principiante. Hace más de seis meses que levanta pesas. Dice Nievas que luego de ese tiempo pasó a ser una deportista de alto rendimiento. Por eso, desde las siete de la mañana, se entrena cada día con la cabeza puesta en superarse. Nievas pasa pocas horas del día y recién puede juntarse con su familia a comer por la noche.

Tanto sus almuerzos como sus cenas están basados en lograr la mayor cantidad de masa muscular posible. Por eso, las proteínas y carbohidratos están en su dieta, pero no tanto las grasas. Para rendir como pesista, tiene que cumplir con las cuatro comidas y colaciones que pueden ser barritas de cereal o frutas.

Durante las competencias, la joven de 16 años no tiene cábalas. “Pienso solamente en enfocarme. Sentir bien la barra, desplazar bien los pies y desplegarme”, expresó Sasha. Los gritos del entrenador y el aliento del público no le entorpecen el levantamiento de sus pesas. “No escucho más que mi voz”, explicó.

El levantamiento de pesas es un deporte de fuerza, pero también de destreza y actitud mental. La menor de los tres hermanos Nievas tiene su marca personal en 82 kilos en arranque y 105 en envión o dos tiempos. Su objetivo es levantar tres kilos más en arranque y también en envión. La velocidad, la fuerza y las cualidades que ella sintió de chiquita la hicieron ganar el Campeonato Panamericano Sub15, en 2012, el bronce en los Sudamericanos de la Juventud un año más tarde y un nuevo bronce en los Juegos Olímpicos de la Juventud, en agosto pasado. Y podrían hacerla triunfar en el Nacional de Mayores que se realizará en diciembre en Santa Fe.

La experiencia en Nanjing
Por Cynthia Tamagusuku @Tucha_

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Fue una de los sesenta deportistas que conformaron la delegación argentina en la segunda edición de los Juegos Olímpicos de la Juventud, celebrados en Nanjing, China. En esta competencia, la representación nacional obtuvo once medallas: dos de oro, cuatro de plata y cinco de bronce. Y una de esas preseas por el tercer puesto se la colgó Sasha Nievas.
“La verdad es que nunca creí que podía llegar a hacerlo”, aseguró la marplatense. “Quedé muy contenta con la medalla y muy satisfecha con el resultado”, explicó.

Nievas se subió al último escalón del podio en la categoría hasta 58 kilos. Además, fue la primera representante argentina en obtener una medalla en estos Juegos Olímpicos para atletas de entre 15 y 18 años. Lo consiguió tras levantar 78 kilos en arranque y 100 en envión. De este modo, concluyó con un total de 178 kilos.

El oro fue para la número uno del ranking de la categoría, Nien-Hsin Chiang, representante de China Taipei, que en total levantó 203 kilos. El segundo lugar fue para la cuarta del mundo, la rusa Anastasia Petrova, que levantó 195. En tanto que en el listado de las mejores de la Federación Internacional de Levantamiento de Pesas (IWF, por sus siglas en inglés), Nievas cierra el top ten y es la segunda a nivel panamericano, detrás de la colombiana Nathalia Llamosa Mosquera.

Pese a que no sabe hablar chino, durante su estadía en Nanjing se manejó con un “inglés medio malo”, confesó la hermana de Francisco. Sin embargo, aprendió algunas palabras en chino, pero para hacer bromas con sus amigos. No obstante, la barrera del idioma no le impidió disfrutar de esta experiencia. “Me va a servir mucho de cara al futuro, quizás en los próximos Juegos Olímpicos”, piensa la joven. Y ese es su gran objetivo: participar en una cita olímpica de mayores y colgarse una medalla. “Creo que, con eso, ya me retiro”, se ilusionó Nievas antes de reír.


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