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Osky Vlk: “Me sentía muy mal, pero en el escenario se me olvidó todo”


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El artista Osky Vlk habló por primera vez sobre la depresión que padeció y que hasta en pensó en dejar la música. También, cómo los escenarios y su gran ídolo lo ayudaron a salir adelante.


Cantar en el Mítico Luna Park, es un golazo. Llenarlo es como clavarla al ángulo. Ahora, cantar por primera vez junto a tu ídolo de toda la vida, es historia pura. Imaginar debutar en uno de los escenarios más populares de la Argentina es para todos. Pocos artistas lo lograron, tal es el caso de Tini, Duki o Abel Pintos. Allí arriba, quizás no todo puede estar de lo más bien. Las estrellas también son buenas a la hora de ocultar sus más íntimos sentimientos. La depresión es una afección que altera a más de 350 millones de personas alrededor del mundo, según el diario “El Periódico”. Oscar Barrios Vlk, más conocido como Osky Vlk, es un joven cantante, compositor y también productor del género Pop reflexivo. Asimismo, padeció nueve meses esta enfermedad, hasta el día en el que recibió una inesperada invitación de su máximo referente, para brillar juntos en el legendario estadio en donde lo supo hacer 22 años atrás el Potro Rodrigo.

EL INICIO DEL FIN (Apertura en el inframundo)

En diferentes episodios de la vida, siempre todo lo que empieza tiene un final. El 15 de febrero del 2021 Osky terminó una relación de dos años y dos meses y al mismo tiempo inició una nueva etapa en el mismísimo infierno de Lucifer. Dos semanas después, empezó a ver la vida diferente. Sin encontrarle sentido a su existencia y muy condicionado por el “tenes que ser” por parte de sus papas, lograron que piense que la música no era lo correcto. Consideró que nada tenía un significado y que nadie lo quería, ni mucho menos merecía ser querido. Para el mes de abril, un poco más animado, se propuso dar un espectáculo musical, luego de recuperarse de un cuadro de covid-19. El sábado 10 del mismo mes, Horacio Rodríguez Larreta anunció por la mañana que los transportes públicos finalizarían su recorrido más temprano, debido a la ola de coronavirus que arrasaba en ese momento. Se amagaba volver a una posible cuarentena y muchos fanáticos que asistirían al recital, muy preocupados por la situación, le cancelaron a último momento. Alarmado y angustiado por el poco público, pensó que no iba a tener éxito esa noche en la Dama de Bollini. Con la cabeza en otro lado, pero su cuerpo en la tarima se presentó a las 20 horas. Enfocado en dar lo mejor de él, poco a poco fue ignorando las cosas negativas por las cuales atravesaba y disfrutó de un espectáculo más. “Me sentía muy mal, pero en el escenario se me olvidó todo”, contó el artista.

RECONCILIACIÓN, VIAJES Y DECISIONES (Escapando del infierno)

El amor renació una vez más. Luego del recital, el nacido en Comodoro Rivadavia abrió nuevamente las puertas de su corazón. Decidido a creer en las segundas oportunidades, volvió a formalizar con su expareja Luciana. Todavía afectado por el qué dirán sus padres y el poco auditorio que tuvo, regresar al lugar donde fue feliz le hizo cambiar un poco la forma de mirar la vida. Convivir con su novia de forma estable, influyó mucho en su bienestar sintiéndose más acompañado. Los meses pasaron y el artista estrenó pocas canciones y no volvió a dar por un tiempo ningún show. Tik tok se convirtió en un gran aliado, puesto a que todo lo que subía de alguna manera se hacía viral y eso lo ayudó un poco a distraerse. “En un punto supe convivir con la depresión. Me sentía un zombi por dentro y por fuera todo más que bien. Me dio miedo todo esto porque pensé que iba a estar deprimido toda la vida y que la gente no lo iba a notar”, expresó el joven compositor, tras recordar los momentos más duros de su carrera.

Cuando todo apuntaba a mejorar, apareció un viaje inoportuno. A falta de vacunas contra el Covid 19 en la cuidad, tuvo que volar a Miami. Los días allí se tornaron grises para él. Solo y sin su novia volvió a imaginar los momentos tormentosos y oscuros en Buenos Aires. El temor por volver a acariciar una depresión más fuerte aún y no tener el pecho de su querida al lado lo abrumaba y no podía soportarlo de tan solo sospecharlo. De regreso a la Argentina, decidió anunciar una última función el 4 de diciembre para terminar el año. Inspirado en finalizar el 2021 mejor de lo que arrancó, poco a poco la idea de presentarse se fue debilitando. Presionado por vender su último concierto y decepcionado por el alcance que tuvo su composición, llamada “Vos también querés”, tomó dos importantes decisiones. “Me acuerdo de que el tema lo lancé un día que jugó la Selección contra Paraguay por Eliminatorias. No vio casi nadie el estreno”, declaró entre risas el comodorense.

A finales del mes de la primavera, a causa de la desesperación y preocupación por el fracaso de su más reciente melodía, decidió cancelar por primera vez un espectáculo. En el marco de esa angustia, por segunda y última vez también finalizó su relación. Desalentado y decaído por sus determinaciones, una parte de su inconsciente le hizo creer que la música no era para él.

EL FIN DEL INICIO (La luz del sol)

1º de noviembre. Luego de suspender su presentación, se enteró que tres días después su máximo referente daría una función, pero las entradas volaron y él se quedó sin la suya. Para su buena suerte, Renzo Luca, productor de Chano, le avisó que tenía su entrada reservada. La llama se prendió cuando vio brillar en vivo a la persona que idolatraba. Luego del evento, decidió viajar a su ciudad natal y planeó quedarse hasta fin de año. Reencontrarse con su familia lo ayudó mucho a librarse de la presión con la que cargaba. Lo mágico sucedió una noche en la que compartía comidas y películas con su prima a quien la llama “Paquete”. Acostumbrado a dormir temprano por los horarios laborales, esa madrugada retrasó un par de horas más su sueño y presenció el momento exacto en donde le llegó un mensaje de Chano, invitándolo a cantar juntos en el Luna Park. Muy entusiasmado y decidido, tomó rápidamente un vuelo para Buenos Aires. “Volví con una carga de magia tremenda, tenía mucha energía. Sentí que estaba resurgiendo”, confesó Osky VlK.

24 de noviembre. Finalmente, Santiago Charpentier y Osky se juntaron a ensayar para el evento. Muy emocionado por conocerlo, se olvidó con quien estaba, tanto así que el diálogo fluyó como amigos. Poco a poco se iba dando cuenta de lo que estaba logrando, dejando atrás gran parte de su pesadilla. Llegó el día del concierto acompañado de ansiedad, que se vio reflejado cuando Osky llegó muy temprano al Luna y estaba complemente vacío. Luego de recorrer el lugar, apareció Chano para terminar de afinar los detalles y le recomendó que en el escenario no se pegue tanto a él y disfrute el momento. “Recorrí todos los pasillos del Luna y pensé en toda la mística que tiene”, agregó el cantante, al repasar el momento antes de cumplir su sueño.

Cuando el tiempo hace resumen y los sueños parecen pesadillas, Osky terminó esa noche cenando junto a Chano en uno de los comedores del lugar. Caminó por todo puerto madero, y en un momento, inclinó la cabeza al cielo, sonrió y sintió que volvió a ser él. De pasar por una fuerte crisis de depresión, una ruptura de amor, viajes inoportunos y reflexivos, la oportunidad de cantar junto a su ídolo hizo que abriera los ojos y se diera cuenta de que lo que más se ama, no se abandona. El resto seguirá siendo historia.


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