El creador de Dibu repasó su trayectoria en esta entrevista con Eter Digital: sus comienzos, sus primeras creaciones, su actualidad en la docencia y el reconocimiento del público.
Era un día nublado en la ciudad de Lomas de Zamora, provincia de Buenos Aires, poco tráfico pero mucha caminata dado que estaban en camino a la peregrinación a Luján. Desde esa marea emerge, con una camisa estilo escocesa y un pantalón jean azul oscuro, Rodolfo Mutuverria, de 55 años, dibujante y creador de Dibu. Nacido en la localidad de Llavallol, con una sonrisa se sienta frente a las mesas que ofrece en la calle el Maxikiosco Marvi, a la espera de un café con medialunas.
Mutuverria saludo felizmente habló del comienzo de su carrera: “Mi vida empezó haciendo dibujos, podría decirse que lo tenía en las venas, para empezar mi papá le encantaba copiar las tapas de las revistas de Pato Donald o Patoruzu y lo hacía muy bien. Mi abuelo materno también hacía dibujos, hasta planos, aunque nunca lo pude conocer, sólo lo sé porque mi papá me lo contaba mucho”. Por un segundo miró al cielo sonriendo y suspiró tranquilo: “Sí, debo confesar que a mí, más que mirar dibujitos, me gustaba mucho saber como se hacían”.
La charla se interrumpe un momento porque un papá con su hijo reconoció a Mutuverria, se dieron un abrazo y se llevó una feliz firma en la funda de su celular. La charla continuó mientras se preparaban los cafés con facturas pronto a llevarse a la mesa. “Tenía claro que mi vida era hacer animación en dibujo, pero yo no sabía a donde poder ir, hasta que en mi adolescencia me anoté en la Escuela de Dibujo Carlos Garaycochea en CABA, para poder realizar dibujos, no me parecía lo mismo porque quería estudiar como poder animar, pero me ayudó mucho en lo que es el diseño o las proporciones de personajes”. ¿Esos fueron sus inicios? “Se podría que sí, yo empecé siendo el asistente de Garaycochea, me enfocaba a imitar su estilo para un diario, iba a su casa para ayudarlo con el material que debía entregar. De ahí surgió mi primera publicación oficial, el “Libro de Oro” de Patoruzú de 1985. Al mismo tiempo de publicarse, estaba en mis últimos años de la secundaria en el Euskal Echea”.
Luego de contarlo, abrió mucho los ojos porque se le vino un recuerdo: contó que de niño su maestra lo privó de un recreo porque quería que él dibujara en el pizarrón. “La maestra pensó que los dibujos me los hacía mi mamá”, explicó. Él procedió a dibujar porque le encantaba al punto de conocerlo de memoria, el resultado en el pizarrón gustó tanto que había llamado a otras maestras a ver lo bien que quedó.
Mutuverria se levantó y tenía ganas de seguir hablando mientras caminaba por Balcarce en dirección a la estación de tren de la Línea Roca. ¿Cómo era la vida Pre Dibu? “Antes de Dibu, yo hacía historietas para la Warner, como lo es Bugs Bunny, El Correcaminos. En su momento hice historietas para Inglaterra, incluso trabajé para Cartoon Network, también en Disney hice Goof Troop”. Y piensa: “Siento que Disney ya no debería ser Disney. A lo que voy es que, cuando hoy te muestran Toy Story, eso no les pertenece a ellos, sino que es de Pixar, Lo que podrían mostrarte de Marvel, son de otras compañías que ellos compraron. Lo que realmente siento que seria de ellos, es lo que saldría del estudio principal de Disney, no de algún estudio comprado”.
¿Qué lo inspiró a crear a Dibu? “Mi inspiración fue crear un dibujo que salió como una propuesta de Telefé. Consistía en crear un personaje que fuera tierno y travieso a la vez. Tras diseñarlo, yo estaba viviendo en mi casa de Llavallol, cuando en 1996 salió a la luz la serie en “Mi familia es un dibujo”. Aclaró feliz: “Fue algo muy importante para mí”.
¿Cómo fué su vida posterior a crear a Dibu?. “Fui muy solicitado, me llamarón de muchos lugares, trabajé en largometrajes de “Érase una vez un bosque” de Hanna Barbera, hice algunas cosas para Cartoons Cartoons, entre ellas el piloto del “El Laboratorio de Dexter” que eran como los inicios de Cartoon Network, también en Telefé en muchos programas conocidos como “Fair Play”, “La Banda Dominguera”, hice trabajos para Canal 9, Waku Waku y Canal 13, he tenido la posibilidad de trabajar en varios cortos animados, entre ellos Patoruzito 2, Isidoro Cañones, hasta tuve el placer de hacer las dos películas de Dibu como director de animación. Hice películas fuera del país como “Papelucho y el Marciano” para Chile, “Huevos y un pollo para México”, hasta tuve el honor de trabajar con Garcia Ferré con “Soledad y Larguirucho”. También pasaron por mí personajes como La Pantera Rosa o Bugs Bunny que es algo maravilloso también”.
En la estación lo aplaudieron porque un grupo de personas estaba escuchando su trayectoria y les dijo que les iba a firmar autógrafos finalizado la entrevista. “Actualmente me dedico a la docencia, hace como 20 años que soy docente, tengo una escuela propia de arte llamada Estudio 13, y estoy participando en eventos como Comic Con. También estuve trabajando en la Comic Con de Colombia, de Ecuador, en la Comic Festival de Perú, Comic Convention Latin America Perú”.
Se escuchó un breve silencio y volvió a mirar a la estación mientras afirmó: “Hoy en los eventos a los que asisto, vienen muchos adultos que vieron la serie desde chicos, nos traen a sus hijos que lo conocen por primera vez, me piden dibujos en vivo, me piden posters. Lo mantengo vigente a través de los eventos, es lindo reencontrarme con toda esa gente que veía desde chico al personaje en “Mi familia es un dibujo” así que en general tuvo muy buena aceptación de público tanto en Argentina como en otras partes del mundo, sobre todo Latinoamerica, por lo que a mi respecto me pone muy feliz por tanto reconocimiento tanto internacional como nacional”.
Mutuverria se despidió con un fuerte abrazo. De ahí camino a la estación firmando autógrafos, mientras se iba perdiendo en las personas de la ciudad.
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