Actor, conductor y futuro locutor, Mauro Álvarez cuenta a ETER Digital cómo comenzó a actuar, por qué se inclinó a la conducción y la locución, y cómo está llevando su último La última Bonaparte, su último proyecto teatral.
Mauro Álvarez empezó trabajando como profesor de educación física, aunque siempre le interesó hacer algo relacionado a la actuación. Recuerda estar sentado en su casa queriendo hacer otra cosa, por lo que se anotó a una escuela de teatro. Estudió durante 6 meses y le encantó tanto que ya quería hacer alguna obra.
Cursó la carrera de Actuación en la Universidad Nacional de las Artes (UNA) pero tuvo que dejarla por problemas de tiempos, aunque siguió estudiando con maestros particulares como Augusto Fernandes. Mientras estudiaba también participaba en diferentes obras y series para televisión como Vecinos en guerra para Telefé o Guapas en Canal 13.
-¿Hubo algún curso o profesor que te haya aportado mucho?
-Creo que (Javier) Daulte, fue el último que conocí. Se combinó la información que yo traía de mi experiencia y sus seminarios, que me volaron la cabeza. Además, después trabajé con él y pude ser dirigido por él. Fue el que más encarriló mi carrera.
Otro de los ámbitos en el que se maneja es la conducción de eventos y programas. Aunque está arraigado a la actuación, comentó que su experiencia como profesor también lo ayudó para desenvolverse en ese trabajo: “Durante muchos años animé fiestas infantiles, entonces fui ganando la experiencia de hablarle a un público”. Contó que recibió la llamada de un amigo que le propuso conducir un evento que estaba organizando, y así empezó a realizar diferentes conducciones hasta hoy.
También empezó a estudiar locución para profesionalizar su carrera. “Un evento de más de 500 personas por ahí me da más experiencia que una clase, pero me metí para tener la matrícula y aprender todo lo que la escuela me pueda dar”, explicó.
-¿Hay algo que te guste de la locución y te interesa hacer a futuro?
-A mí me gusta mucho la conducción, por lo que me encantaría conducir radio, también hacer publicidad, pero hay algo de la conducción que me encanta, de manejar los tiempos. Me parece que es por donde voy a encarar.
-¿Y cómo te llevas con la presión de la radio? Por ejemplo, que venga el productor con cambios de última hora para levantar el rating.
– Es un vértigo. La misma presión siento cuando conduzco un evento para 500 personas de alguna marca importante. A ver, no es lo mismo, no hay rating, pero uno está pensando: “¿Y, la están pasando bien o no lo están pasando bien? ¿Está bien lo que estoy diciendo?”. Más allá de que siempre hay un guión, y mirás una carita para ver cómo está la gente. En la radio no tenes caritas pero está el rating.
Sus trabajos recientes
Una de sus últimas obras fue La última Bonaparte, que protagonizó junto a Silvia Pérez, en la que Alvarez actúa como director de un futuro documental sobre Marie Bonaparte, última descendiente de Napoleón, donde explora las coincidencias que hay con la vida de Silvia. Actualmente están cerrando su segunda temporada.
-¿Cómo te contactaron para participar en esta obra?
-El director, Dennis Smith, con quien yo ya había trabajado, había sido contactado por el escritor de la obra, y me dijo: “Estoy por hacer una obra con Silvia Pérez, te necesito, quiero que estés”. Ahí empezamos a dialogar un poco y empezamos a ensayar. Ahí conocí a Silvia, que la amo, somos amigos y terminó saliendo lo que salió, pero a través de Dennis fue el contacto.
-¿Llevó mucho tiempo ensayar la obra?
-Habremos estado un mes y medio, pero muchas horas por día, encima pleno verano, hacía un calor. La grabación de los videos fue simple porque el director la tenía clara, fuimos y grabamos porque estaba todo guionado. La previa y el ensayo fue duro, la obra tiene un ritmo especial y tiene muchos cambios repentinos de un lugar a otro, pero eso, fue poco tiempo en el calendario pero mucho en horas.
La obra tuvo un buen recibimiento y en su primera temporada llenaron todas las funciones. “Tuvimos muy buenas críticas. La Nación, que es uno de los diarios que sigue poniendo notas a los espectáculos, nos puso un excelente”, destacó, incluyendo también varios medios independientes que les gusto la obra.
Alvarez comentó que el público y el boca a boca fueron lo más importante para la difusión. “Hubo un momento en la que no venían muchas personas, pero al dueño del teatro le gustaba tanto la obra que decidió dejarla y por suerte remontamos”, contó acerca de la última temporada, y adelantó que también están en tratativas para un nuevo regreso.
-¿Estás planeando algún otro proyecto?
-Sí, algunas cosas dando vuelta con el mismo director que quiere reestrenar una obra que ya habíamos hecho. Trata sobre la separación de una pareja y los puntos de vista de cada uno, una obra muy sensible que cualquiera se puede sentir identificado. También tengo que filmar una película en noviembre, pero de eso no puedo decir nada.
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