Belén Badía, locutora egresada en ETER, fue una de las voces que incentivó la transmisión de Siempre es hoy desde Acevedo 262, junto a Darío Szmulewicz, director de la escuela de Radio. “Entre los alumnos de ETER hubo buena repercusión del programa por eso surgió la idea de venir acá, un lugar donde se piensa la radio. Ojalá le sirva a los jóvenes”, expresó.
Por Melina Ortiz Erbes
“El programa nació el año pasado con gente joven y con, al mismo tiempo, periodistas experimentados en radio. Eso fue un gran combo que se sumó a la coyuntura política donde se han apagado muchas voces”, contó sobre el programa. “Hemos tenido la posibilidad de juntar muchas oyentes que escuchaban n a Víctor Hugo y Radio Nacional, eso sumado a la propuesta nuestra se ha armado algo muy lindo que me parece que la gente que escucha y hace radio lo valora”, agregó.
“La falta de locutores en la radio me duele, no tienen protagonismo y así se pierde dinamismo”, manifestó dolida ante la actualidad que siente que vive su profesión. Sobrina de Juan Alberto Badía y nieta del recordado locutor Juan Ramón siente la profesión como nadie. “Ser locutora, estar en radio o en tele es una forma de vivir. Vivo muy naturalmente estar frente a un micrófono. La naturalidad es una de mis características, eso me lo dio haber vivido en una familia de medios”, manifestó.
-¿Qué significó para vos volver a ETER como profesional?
-Tuve varias etapas aquí, como estudiante, como docente después y ahora así, haciendo radio. Es un crecimiento enorme y continuo. Estoy orgullosa de lo que me dio ETER, y quiero devolver un poco
-¿Qué consejo le das a los estudiantes?
-La radio es una suma de talentos, si vos tenés algo para dar, un aporte creativo más un pensamiento nutrido, un conocimiento, todo suma. Les aconsejo que se curtan, se nutran, que estudien para poder sumar.
“Lo hiciste muy bien, pero…”, eso le decía Juan Alberto Badía, su tío, quien, asegura, le puso la vara muy alta. Agradecida, concluyó: “Su exigencia me permitió aprender siempre”.
Agregar comentario