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Demi: El descubrimiento de la libélula


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La demisexualidad abre un mundo nuevo para cada una de las persona que se no se sienten identificadas dentro del espectro asexual, a partir de esta nueva identidad cada uno puede descubrir otras formas de poder experimentar su orientación sexual.

En un Starbucks en pleno centro de Buenos Aires se encontraba escribiendo en su computadora la nueva entrada para su blog. Tenía en la mesa una agenda personal en donde anotaba todos sus recuerdos más íntimos, eso le hacía recordar cómo inició todo este viaje que hasta el día de hoy recordaba con mucho orgullo a través de la forma en cómo contaba su experiencia. “El 24 de mayo del 2010 tome por fin la decisión de crear mi propio blog, ese que me había recomendado mi terapeuta y amigo Marco Nicasio”, recordó Elena mientras tomaba su Caramel Macchiato cómo fue ese momento que la ayudó a abrirse y a contar sus secretos.

La organización Advocates For Youth (AFY), realizó estudios a personas con diferentes orientaciones sexuales, menos de la mitad de personas asexuales en el mundo han recibido sugerencias o intentos de tratar de “curar” su asexualidad mediante terapias de conversión y más del 60 por ciento, no se reconocen públicamente como tal por miedo a la patologización. Esto sucede a través de múltiples microagresiones que frecuentemente se derivan de una falta de comprensión por parte de las personas que lo rodean, aseguran tras los resultados obtenidos.

Eduard Jiménez, licenciado en Psicología, maestrante de Psicoanálisis en la UBA y acompañante terapéutico, explica que las personas demisexuales pueden enfrentar desafíos como la “falta de comprensión” de su orientación sexual por parte de otros, la presión social para encajar en normas de atracción sexual inmediata y la dificultad para establecer conexiones emocionales profundas.“En mi práctica, abordó la demisexualidad con una perspectiva de aceptación y comprensión, ayudando a las personas a explorar su identidad y a encontrar estrategias para desarrollar relaciones saludables y satisfactorias en sus vidas”, manifestó el Psicólogo al momento de tratar profesionalmente con sus pacientes.

Terapeutas, Psicólogos y Psiquiatras que visitó Elena en su juventud  le decían que solo era una chica introvertida y le faltaba salir para encontrar a las personas adecuadas. Todos le daban la misma respuesta: “Todo está muy bien con vos, solamente debes abrirte y ser más extrovertida para que surjan las posibilidades”. Intentó abrirse a diversas experiencias a través de su independencia, lo que la llevó a tomar el primer paso para iniciar esa búsqueda de personas que la ayudaran a descubrir su propia identidad sexual.

Por lo general los jóvenes tienen una vida sexual activa a partir de los 15 años como edad promedio, así lo informó la UNICEF en su último censo realizado en el año 2015 en América Latina y el Caribe. En la adolescencia y primeros años de adultos jóvenes, la exploración de la sexualidad juega un papel muy importante para el desarrollo físico y emocional de las personas. En 11 países de la región, uno de cada nueve personas de entre 15 a 24 años había tenido su primera relación sexual antes de haber cumplido los 15 años, (siendo un 11 por ciento de la población). Mientras que en algunos países este valor supera el 13 por ciento, en otros (Paraguay, Belice, Perú y Bolivia) rondaba el siete por ciento.

“Ely si seguís esperando te vas a quedar sola”, esa frase de sus amigas la atormentó durante toda su adolescencia. En su interior sabía que no estaba apuntando bien en el juego del amor, ya que elegir una persona con quien estar por el resto de su vida de manera sexual y sentimental tenía que ir de la mano siempre. Debido a que creció viendo películas de Disney donde mostraban el estereotipo del príncipe azul y ella soñaba en tener uno si o si. Pero con la realidad de su situación sabía que que era imposible vivir en un cuento de hadas que tanto anhelo.

Cuando habla de su primera experiencia sexual, no tiene los mejores recuerdos, no fue lo que ella esperaba, ni con la persona que quería. En ese momento decidió dejarse llevar por la presión y experimentar eso que sus compañeras ya habían hecho en la secundaria. A la salida de un bar en el barrio porteño de Palermo, se fue con Rodrigo, el mejor amigo de Florencia, su amiga. “Pensé que era la persona correcta porque era amigo de la infancia de Flor”, reflexiono Elena.

Con el café a medio tomar y en la incomodidad del momento decidió contar cómo fue su primera relación sexual. “Al estar con Rodrigo me di cuenta del significado de la primera vez del acto sexual”, mencionó Elena. Ella solo quería sacarse la presión de no haberlo hecho todavía, para él también era su primera vez. Siempre se repitia la misma frase: “Esa noche no la voy a olvidar jamás”, pero no porque la haya pasado bien, sino porque tuvo relaciones sexuales con alguien que no conocia ni por el que sentia atracción, concluyó Elena.

A Rodrigo, el amigo de Flor, no se lo cruzó más, y él tampoco volvió a buscarla. Un tiempo después reaccionó a cómo algo tan importante en la vida de las personas para ella fue una completa desgracia. La presión le jugó una mala pasada en su vida. Siempre se imaginó ese momento con amor, con deseo, con alguien que durará para toda la vida, pero lo que vivió fue con desamor, desilusión y con alguien que no le importaba los sentimientos ajenos.

“Para la gran mayoría de las personas la sexualidad de los seres humanos se divide en heterosexualidad, homosexualidad, bisexualidad y asexualidad. Cuatro orientaciones muy definidas y que están relacionadas con la atracción sexual hacia personas del sexo opuesto, hacia personas del mismo sexo, hacia ambos géneros y en último término, hacia ningún género en la ausencia de atracción sexual por completo”, expresó el psicologo Jiménez sobre las diferentes orientaciones sexuales.

Chaos Faulder, un estudiante de tercer año con especialización en psicólogia asegura que: “el sexo es una característica definitoria en muchas etapas de la vida”, depende la instancia, ya sea a finales de la secundaria, en la universidad y en la vida de un adulto. Pero para él, las personas que se identifican como demisexuales, este aspecto es una experiencia diferente ya que tiene sus propios procesos a la hora de conectar con el otro, como el poder crear esa conexión o vínculo para tener algo más allá de lo emocional.

Tambien cuenta que la demisexualidad se encuentra presente dentro de la “experiencia asexual” que es diferente para cada uno, hay diversos espectros dentro de la comunidad asexual. “Algunas personas que se identifican como asexuales, comúnmente denominadas “aces ” o”grisexuales “, no se sienten atraídas por las personas de forma sexual. Mientras que otros pueden sentir atracción sexual dependiendo de la conexión emocional que tengan”, agregó Faulder, estudiante de psicología.

Elena a medida que pasó por distintos especialistas y escuchó más de una charla sobre la demisexualidad comenzó a comprender su propia orientación sexual. En ese momento se dió cuenta que no estaba loca, que la frase que la atormentaba  era solo un eco en su cabeza. Era totalmente normal por lo que estaba pasando, sus días en donde por momentos todo era gris, por fin tomaron color y en donde años atrás no imaginaba que esto podía llegar a pasar.

“Desde pequeña siempre me sentí en un viaje en donde podría descubrir mi propia identidad”, recordó Elena al descubrir la historia mágica de las libélulas. Ese pequeño y diferente insecto que es muy difícil de encontrar, le dio una gran lección de vida en uno de los momentos más importante para ella, para llegar a su autoaceptación y poder reconocerse por quien es.

En Argentina, la Ley de Identidad de Género 26.743, en su artículo 2° define a la identidad de género como: “La vivencia interna e individual del género tal como cada personas la siente, la cual puede corresponder o no con el género asignado al momento del nacimiento, incluyendo la vivencia personal del cuerpo”.

La sexóloga Carolina Meloni se refirió a su trabajo: “Como profesional de la salud sexual no se requiere ningún tipo de intervención, como activista, pero sobre todo como sujeto de derechos que reconoce los mismos en las otras personas, es importante tener información adecuada y difundirla para que no sea patológico ni se intervengan a las identidades que se salen de la norma”.

Los sexólogos se centran en la especialidad de los problemas/dificultades sexuales de origen psicológico, Carolina Meloni, trata tanto casos individuales como de parejas, temas como eyaculación precoz, falta de deseo sexual, dependencia emocional, anorgasmia, entre otras. “La sexualidad es un área dentro de la identidad de una persona. Es parte constitutiva de un ser humano”, comentó la sexóloga.

Los demis, como se los conoce comúnmente, tienen muy distintas visiones sobre la sexualidad, como recoge en sus censos la comunidad AVEN. Alrededor de la mitad de los encuestados que se definieron como demisexuales manifestaron una clara tendencia a la indiferencia en relación al sexo, mientras que el 30 por ciento mostró una actitud favorable, en cambio el 16 por ciento que aseguró sentir repulsión, tanto a la práctica como a las distintas referencias relacionadas con los actos sexuales.

“El poder escribir fue una liberación para mis problemas y conflictos internos”, confesó Elena. La gran comunidad de internet le dió una gran sorpresa, ya que lo que buscaba por sí misma, este tiempo estaba reflejado en personas que también sentían, pensaban y buscaban la misma respuesta que ella ya tenía. “Soy demisexual, y ¿qué?”, fue su primera publicación en su blog, algo que hasta el día de hoy lo cuenta con orgullo.

“La aceptación y comprensión de la demisexualidad son fundamentales para el bienestar emocional y la autoaceptación de una persona demisexual. Al entender que su orientación sexual es válida y legítima, pueden liberarse de la presión de  normas sociales, además les brinda la oportunidad de establecer conexiones significativas y satisfactorias”, expresa el Psicólogo Eduard Jimenez sobre el trato de la sociedad hacia los demisexuales.

“Visibilizar la patologización ante un sistema que considera el aspectro asexual una forma de enfermedad fisica o mental que debe ser revertida en base a la medicación o terapia. Exponen las violencias que implica salir o no del closet, maximizando el miedo a explicar las vivencias una vez que las personas se identifican como tales en el espacio público”, dijo Chaos Faulder sobre como es el trato que se les da las personas demisexuales una vez que se enfrentan con el mundo real.

Elena es una libélula entre muchas otras que ayuda a contar su historia y la de muchos: “Al descubrir la demisexualidad me ayudó a entenderme mejor a mí misma y a comprender ciertas situaciones que siempre me habían hecho sentir “rota”, como si algo no funcionara bien dentro de mí”. Pero al verlo desde un lugar más adulto supo que hoy lo puede asimilar tal como es y sentir el apoyo de sus amigos, familia y el entorno que la rodea.

Terminando con la conversación y con las tazas vacías sobre la mesa, Elena cuidadosamente comenzó a guardar su agenda, su computadora, y su objeto más preciado, la lapicera que le había regalado su madre el día que comenzó a escribir su historia y en donde más personas podrían conocer su experiencia. “Debemos darnos el espacio para conocernos y entender que está bien si no encajamos en lo que parece que ‘debemos’ encajar”, planteó Elena.

“No es necesario ayudar a nadie a descubrir ninguna orientación. Nos vamos identificando a medida que vamos reconociendo emociones, sensaciones, conductas, pensamientos, sobre todo en el vínculo con las otras personas y con la información adecuada, lo cual nos facilita la construcción de una denominación de nuestra identidad”, expuso la sexóloga Carolina Meloni sobre el descubrimiento sexual de cada individuo.

Según Demisexuality Resource Center normalmente, los demis pueden tardar muchos años en sentir por primera vez atracción sexual, debido a las necesidades tan específicas que requieren para sentir deseo. Es posible que a lo largo de su vida sólo acaben viendo cómo se les despierta el instinto sexual con una o dos personas. Hay personas que no se denominan como demisexuales pero eligen solo tener relaciones con las personas que aman y eso no les hace ser demisexuales.

Mientras en los países occidentales los demisexuales comienzan a tener cada vez mayor presencia mediática, especialmente en Internet, encontramos asociaciones como la DRC que, además de dar visibilidad tratan de ofrecer respuestas. En la gran mayoría del mundo las personas pertenecientes a orientaciones sexuales minoritarias no tienen siquiera la oportunidad de reconocerse como lo que son, y esto genera aún más dolor en sus vidas e incomprensión en sus entornos como explica el informe de Demisexuality Resource Center.

Mientras se iba del café y retomaba su camino de vuelta al trabajo, Elena afirma que siguen existiendo puntos y malinterpretaciones a su modo de ver, que a veces le generan incomodidad, como dar por sentado que las personas dentro del espectro asexual no les interesa el sexo. Además considera que es importante continuar difundiendo el mensaje y más en el mes de junio cuando miles de personas salen a la calle a manifestar sus derechos mediante la celebración del día del orgullo LGBTIQ+.

“Hoy en día se puede hablar de manera más abierta sobre los temas de sexualidad”, manifestó Elena sobre como en la actualidad se pueden celebrar estas fechas donde hace que se visibilice la lucha que tienen los diferentes colectivos con respecto a sus orientaciones, y agregó:  “Actualmente tengo mayor libertad de poder comunicar quién soy y como me siento con mi sexualidad”.

En Argentina, el Día y Marcha por el Orgullo LGBTIQ+ se celebra el primer sábado de noviembre. La primera Marcha tuvo lugar en Buenos Aires por primera vez en 1992, bajo la dirección de Carlos Jauregui y César Cigliutti, que reunieron a unas 300 personas para celebrar el orgullo en la ciudad. “Siento que la sociedad en la actualidad es más abierta y es algo que cada vez está más normalizado en los jóvenes. Ahora tienen mayor acceso a canales en donde poder compartir sus experiencias y sentirse respaldados”, comentó Elena sobre las diversas manifestaciones que se llevan a cabo para informar sobre la comunidad.

En su oficina en donde siente la comodidad a la hora de expresar sus palabras, empieza con su rutina abriendo las cortinas blancas, en el espacio se siente el olor a lavanda de las velas que compró para armonizar su día y con la luz natural que la acompaña al escribir una publicación para su blog. “Quiero dejar como reflexión a mis lectores  que no están solos, y que tienen una comunidad que los respalda para brindarles el apoyo, y la ayuda que necesitan para dar el primer paso y así encontrar su propia respuesta”.

En un Starbucks en pleno centro de Buenos Aires se encontraba escribiendo en su computadora la nueva entrada para su blog. Tenía en la mesa una agenda personal en donde anotaba todos sus recuerdos más íntimos, eso le hacía recordar cómo inició todo este viaje que hasta el día de hoy recordaba con mucho orgullo a través de la forma en cómo contaba su experiencia. “El 24 de mayo del 2010 tome por fin la decisión de crear mi propio blog, ese que me había recomendado mi terapeuta y amigo Marco Nicasio”, recordó Elena mientras tomaba su Caramel Macchiato cómo fue ese momento que la ayudó a abrirse y a contar sus secretos.

La organización Advocates For Youth (AFY), realizó estudios a personas con diferentes orientaciones sexuales, menos de la mitad de personas asexuales en el mundo han recibido sugerencias o intentos de tratar de “curar” su asexualidad mediante terapias de conversión y más del 60 por ciento, no se reconocen públicamente como tal por miedo a la patologización. Esto sucede a través de múltiples microagresiones que frecuentemente se derivan de una falta de comprensión por parte de las personas que lo rodean, aseguran tras los resultados obtenidos.

Eduard Jiménez, licenciado en Psicología, maestrante de Psicoanálisis en la UBA y acompañante terapéutico, explica que las personas demisexuales pueden enfrentar desafíos como la “falta de comprensión” de su orientación sexual por parte de otros, la presión social para encajar en normas de atracción sexual inmediata y la dificultad para establecer conexiones emocionales profundas.“En mi práctica, abordó la demisexualidad con una perspectiva de aceptación y comprensión, ayudando a las personas a explorar su identidad y a encontrar estrategias para desarrollar relaciones saludables y satisfactorias en sus vidas”, manifestó el Psicólogo al momento de tratar profesionalmente con sus pacientes.

Terapeutas, Psicólogos y Psiquiatras que visitó Elena en su juventud  le decían que solo era una chica introvertida y le faltaba salir para encontrar a las personas adecuadas. Todos le daban la misma respuesta: “Todo está muy bien con vos, solamente debes abrirte y ser más extrovertida para que surjan las posibilidades”. Intentó abrirse a diversas experiencias a través de su independencia, lo que la llevó a tomar el primer paso para iniciar esa búsqueda de personas que la ayudaran a descubrir su propia identidad sexual.

Por lo general los jóvenes tienen una vida sexual activa a partir de los 15 años como edad promedio, así lo informó la UNICEF en su último censo realizado en el año 2015 en América Latina y el Caribe. En la adolescencia y primeros años de adultos jóvenes, la exploración de la sexualidad juega un papel muy importante para el desarrollo físico y emocional de las personas. En 11 países de la región, uno de cada nueve personas de entre 15 a 24 años había tenido su primera relación sexual antes de haber cumplido los 15 años, (siendo un 11 por ciento de la población). Mientras que en algunos países este valor supera el 13 por ciento, en otros (Paraguay, Belice, Perú y Bolivia) rondaba el siete por ciento.

“Ely si seguís esperando te vas a quedar sola”, esa frase de sus amigas la atormentó durante toda su adolescencia. En su interior sabía que no estaba apuntando bien en el juego del amor, ya que elegir una persona con quien estar por el resto de su vida de manera sexual y sentimental tenía que ir de la mano siempre. Debido a que creció viendo películas de Disney donde mostraban el estereotipo del príncipe azul y ella soñaba en tener uno si o si. Pero con la realidad de su situación sabía que que era imposible vivir en un cuento de hadas que tanto anhelo.

Cuando habla de su primera experiencia sexual, no tiene los mejores recuerdos, no fue lo que ella esperaba, ni con la persona que quería. En ese momento decidió dejarse llevar por la presión y experimentar eso que sus compañeras ya habían hecho en la secundaria. A la salida de un bar en el barrio porteño de Palermo, se fue con Rodrigo, el mejor amigo de Florencia, su amiga. “Pensé que era la persona correcta porque era amigo de la infancia de Flor”, reflexiono Elena.

Con el café a medio tomar y en la incomodidad del momento decidió contar cómo fue su primera relación sexual. “Al estar con Rodrigo me di cuenta del significado de la primera vez del acto sexual”, mencionó Elena. Ella solo quería sacarse la presión de no haberlo hecho todavía, para él también era su primera vez. Siempre se repitia la misma frase: “Esa noche no la voy a olvidar jamás”, pero no porque la haya pasado bien, sino porque tuvo relaciones sexuales con alguien que no conocia ni por el que sentia atracción, concluyó Elena.

A Rodrigo, el amigo de Flor, no se lo cruzó más, y él tampoco volvió a buscarla. Un tiempo después reaccionó a cómo algo tan importante en la vida de las personas para ella fue una completa desgracia. La presión le jugó una mala pasada en su vida. Siempre se imaginó ese momento con amor, con deseo, con alguien que durará para toda la vida, pero lo que vivió fue con desamor, desilusión y con alguien que no le importaba los sentimientos ajenos.

“Para la gran mayoría de las personas la sexualidad de los seres humanos se divide en heterosexualidad, homosexualidad, bisexualidad y asexualidad. Cuatro orientaciones muy definidas y que están relacionadas con la atracción sexual hacia personas del sexo opuesto, hacia personas del mismo sexo, hacia ambos géneros y en último término, hacia ningún género en la ausencia de atracción sexual por completo”, expresó el psicologo Jiménez sobre las diferentes orientaciones sexuales.

Chaos Faulder, un estudiante de tercer año con especialización en psicólogia asegura que: “el sexo es una característica definitoria en muchas etapas de la vida”, depende la instancia, ya sea a finales de la secundaria, en la universidad y en la vida de un adulto. Pero para él, las personas que se identifican como demisexuales, este aspecto es una experiencia diferente ya que tiene sus propios procesos a la hora de conectar con el otro, como el poder crear esa conexión o vínculo para tener algo más allá de lo emocional.

Tambien cuenta que la demisexualidad se encuentra presente dentro de la “experiencia asexual” que es diferente para cada uno, hay diversos espectros dentro de la comunidad asexual. “Algunas personas que se identifican como asexuales, comúnmente denominadas “aces ” o”grisexuales “, no se sienten atraídas por las personas de forma sexual. Mientras que otros pueden sentir atracción sexual dependiendo de la conexión emocional que tengan”, agregó Faulder, estudiante de psicología.

Elena a medida que pasó por distintos especialistas y escuchó más de una charla sobre la demisexualidad comenzó a comprender su propia orientación sexual. En ese momento se dió cuenta que no estaba loca, que la frase que la atormentaba  era solo un eco en su cabeza. Era totalmente normal por lo que estaba pasando, sus días en donde por momentos todo era gris, por fin tomaron color y en donde años atrás no imaginaba que esto podía llegar a pasar.

“Desde pequeña siempre me sentí en un viaje en donde podría descubrir mi propia identidad”, recordó Elena al descubrir la historia mágica de las libélulas. Ese pequeño y diferente insecto que es muy difícil de encontrar, le dio una gran lección de vida en uno de los momentos más importante para ella, para llegar a su autoaceptación y poder reconocerse por quien es.


En Argentina, la Ley de Identidad de Género 26.743, en su artículo 2° define a la identidad de género como: “La vivencia interna e individual del género tal como cada personas la siente, la cual puede corresponder o no con el género asignado al momento del nacimiento, incluyendo la vivencia personal del cuerpo”.

La sexóloga Carolina Meloni se refirió a su trabajo: “Como profesional de la salud sexual no se requiere ningún tipo de intervención, como activista, pero sobre todo como sujeto de derechos que reconoce los mismos en las otras personas, es importante tener información adecuada y difundirla para que no sea patológico ni se intervengan a las identidades que se salen de la norma”.

Los sexólogos se centran en la especialidad de los problemas/dificultades sexuales de origen psicológico, Carolina Meloni, trata tanto casos individuales como de parejas, temas como eyaculación precoz, falta de deseo sexual, dependencia emocional, anorgasmia, entre otras. “La sexualidad es un área dentro de la identidad de una persona. Es parte constitutiva de un ser humano”, comentó la sexóloga.

Los demis, como se los conoce comúnmente, tienen muy distintas visiones sobre la sexualidad, como recoge en sus censos la comunidad AVEN. Alrededor de la mitad de los encuestados que se definieron como demisexuales manifestaron una clara tendencia a la indiferencia en relación al sexo, mientras que el 30 por ciento mostró una actitud favorable, en cambio el 16 por ciento que aseguró sentir repulsión, tanto a la práctica como a las distintas referencias relacionadas con los actos sexuales.

“El poder escribir fue una liberación para mis problemas y conflictos internos”, confesó Elena. La gran comunidad de internet le dió una gran sorpresa, ya que lo que buscaba por sí misma, este tiempo estaba reflejado en personas que también sentían, pensaban y buscaban la misma respuesta que ella ya tenía. “Soy demisexual, y ¿qué?”, fue su primera publicación en su blog, algo que hasta el día de hoy lo cuenta con orgullo.

“La aceptación y comprensión de la demisexualidad son fundamentales para el bienestar emocional y la autoaceptación de una persona demisexual. Al entender que su orientación sexual es válida y legítima, pueden liberarse de la presión de  normas sociales, además les brinda la oportunidad de establecer conexiones significativas y satisfactorias”, expresa el Psicólogo Eduard Jimenez sobre el trato de la sociedad hacia los demisexuales.

“Visibilizar la patologización ante un sistema que considera el aspectro asexual una forma de enfermedad fisica o mental que debe ser revertida en base a la medicación o terapia. Exponen las violencias que implica salir o no del closet, maximizando el miedo a explicar las vivencias una vez que las personas se identifican como tales en el espacio público”, dijo Chaos Faulder sobre como es el trato que se les da las personas demisexuales una vez que se enfrentan con el mundo real.

Elena es una libélula entre muchas otras que ayuda a contar su historia y la de muchos: “Al descubrir la demisexualidad me ayudó a entenderme mejor a mí misma y a comprender ciertas situaciones que siempre me habían hecho sentir “rota”, como si algo no funcionara bien dentro de mí”. Pero al verlo desde un lugar más adulto supo que hoy lo puede asimilar tal como es y sentir el apoyo de sus amigos, familia y el entorno que la rodea.

Terminando con la conversación y con las tazas vacías sobre la mesa, Elena cuidadosamente comenzó a guardar su agenda, su computadora, y su objeto más preciado, la lapicera que le había regalado su madre el día que comenzó a escribir su historia y en donde más personas podrían conocer su experiencia. “Debemos darnos el espacio para conocernos y entender que está bien si no encajamos en lo que parece que ‘debemos’ encajar”, planteó Elena.

“No es necesario ayudar a nadie a descubrir ninguna orientación. Nos vamos identificando a medida que vamos reconociendo emociones, sensaciones, conductas, pensamientos, sobre todo en el vínculo con las otras personas y con la información adecuada, lo cual nos facilita la construcción de una denominación de nuestra identidad”, expuso la sexóloga Carolina Meloni sobre el descubrimiento sexual de cada individuo.

Según Demisexuality Resource Center normalmente, los demis pueden tardar muchos años en sentir por primera vez atracción sexual, debido a las necesidades tan específicas que requieren para sentir deseo. Es posible que a lo largo de su vida sólo acaben viendo cómo se les despierta el instinto sexual con una o dos personas. Hay personas que no se denominan como demisexuales pero eligen solo tener relaciones con las personas que aman y eso no les hace ser demisexuales.

Mientras en los países occidentales los demisexuales comienzan a tener cada vez mayor presencia mediática, especialmente en Internet, encontramos asociaciones como la DRC que, además de dar visibilidad tratan de ofrecer respuestas. En la gran mayoría del mundo las personas pertenecientes a orientaciones sexuales minoritarias no tienen siquiera la oportunidad de reconocerse como lo que son, y esto genera aún más dolor en sus vidas e incomprensión en sus entornos como explica el informe de Demisexuality Resource Center.

Mientras se iba del café y retomaba su camino de vuelta al trabajo, Elena afirma que siguen existiendo puntos y malinterpretaciones a su modo de ver, que a veces le generan incomodidad, como dar por sentado que las personas dentro del espectro asexual no les interesa el sexo. Además considera que es importante continuar difundiendo el mensaje y más en el mes de junio cuando miles de personas salen a la calle a manifestar sus derechos mediante la celebración del día del orgullo LGBTIQ+.

“Hoy en día se puede hablar de manera más abierta sobre los temas de sexualidad”, manifestó Elena sobre como en la actualidad se pueden celebrar estas fechas donde hace que se visibilice la lucha que tienen los diferentes colectivos con respecto a sus orientaciones, y agregó:  “Actualmente tengo mayor libertad de poder comunicar quién soy y como me siento con mi sexualidad”.

En Argentina, el Día y Marcha por el Orgullo LGBTIQ+ se celebra el primer sábado de noviembre. La primera Marcha tuvo lugar en Buenos Aires por primera vez en 1992, bajo la dirección de Carlos Jauregui y César Cigliutti, que reunieron a unas 300 personas para celebrar el orgullo en la ciudad. “Siento que la sociedad en la actualidad es más abierta y es algo que cada vez está más normalizado en los jóvenes. Ahora tienen mayor acceso a canales en donde poder compartir sus experiencias y sentirse respaldados”, comentó Elena sobre las diversas manifestaciones que se llevan a cabo para informar sobre la comunidad.

En su oficina en donde siente la comodidad a la hora de expresar sus palabras, empieza con su rutina abriendo las cortinas blancas, en el espacio se siente el olor a lavanda de las velas que compró para armonizar su día y con la luz natural que la acompaña al escribir una publicación para su blog. “Quiero dejar como reflexión a mis lectores  que no están solos, y que tienen una comunidad que los respalda para brindarles el apoyo, y la ayuda que necesitan para dar el primer paso y así encontrar su propia respuesta”.


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