Marcela Feudale, la histórica locutora de Showmatch habló del programa, su relación con Marcelo Tinelli y la política.
Por Solange Irepa
Marcela Feudale es la histórica locutora de Showmatch hace 28 años. Es periodista y Licenciada en historia. Conduce Contamelo al aire, en Radio del plata, y es panelista en Implacables y produce videos sobre historia en YouTube.
—Cuando eras chica jugabas con tu hermana a la radio, tenían un grabador y hacían programas. Hoy conducís un programa de radio. ¿Te imaginabas que iba a ser así?
Cuando uno empieza a jugar lo hace inconscientemente, no sabía que ese juego que yo hacía era una carrera. La radio era muy fuerte cuando yo era chica, tenía gente que era muy intelectual, de un conocimiento muy alto; tenía mucho más contenido que la televisión, que en aquel entonces era muy precaria.
—¿Cómo nació tu vínculo con la radio?
Se escuchaba mucha radio en casa. Mi tío trabajaba en Editorial Perfil. Yo quería ser creativa publicitaria, me gustaba el armado de publicidad, me parecía interesante, creativo. Mi tío me dijo: ¿“Por qué no anotas en locución?. Vos tenes una gran voz”. Y ahí fue cuando decidí y me di cuenta de que era eso.
—¿Qué preferís: radio o televisión?
A mí me gusta mucho la radio, la televisión es hermosa pero más me gusta la radio.
—¿Cómo es trabajar con Marcelo Tinelli?
Uno a esta altura del partido lo tiene asimilado. Es muy divertido porque él tiene una veta humorística, la tuvo en su momento con Videomatch y la tiene ahora con lo que improvisa al aire. Es el número uno de la televisión y a uno le sirve porque te abre puertas, te mantiene vigente. Es una persona muy agradable.
—¿Creés que Marcelo de verdad se quiere dedicar a la política o es una mojada de oreja al gobierno?
Creo que sí, se quiere dedicar a la política. Me parece que no es el momento, y que se dio cuenta de que habría que esperar que la Argentina sea un país más viable.
—Sos la mujer de Showmatch, el resto son todos hombres. ¿Alguna vez te hicieron sentir incómoda? ¿Se sobrepasaron o te acosaron?
No, no. A mí me cuidaron mucho los chicos, eran muy caballeros conmigo, nunca me hicieron sentir incómoda ni me acosaron. Era otra época y la cabeza de hombres y mujeres funcionaba de otra manera.
Agregar comentario