Fahid Al-Ahmad Al-Yaber Al-Sabah se metió en el campo de juego en España ‘82 y anuló el gol francés sin intervención policial
En el Mundial de España 1982 se vivió, tal vez, uno de los mayores acontecimientos de la historia de las copas del mundo. El grupo D, compuesto por Francia, Kuwait, Checoslovaquia e Inglaterra, se denominó como el “grupo de la muerte”. En el segundo encuentro de fase inicial, disputado entre galos y kuwaitíes, un jeque interrumpió el partido para pedir que se anulara un gol del país europeo. Fahid Al-Ahmad Al-Yaber Al-Sabah, presidente de la federación de fútbol kuwaití, hermano del emir quien era el máximo gobernante del país de Medio Oriente, se metió dentro del terreno de juego luego de que Alain Giresse marcara el 4-1 parcial. En ese momento, el jeque, con su gran poder político, pidió que se anulara el gol del francés protestando enérgicamente e ingresando al césped sin que la policía española prohibiera su entrada. Para sorpresa de muchos, el jeque saltó con total libertad haciendo que el partido se detuviera. Con tranquilidad, Fahid buscó al colegiado soviético Myroslav Stupar, y mantuvo una breve charla con él.
Lejos de hacer respetar el reglamento, el árbitro accedió a la petición del jeque y anuló el gol de Francia. Michel Platini, histórico jugador y capitán de la selección gala, reprochó la decisión, acompañado de su entrenador Michel Hidalgo, que finalmente fue expulsado del partido.
Luego de la anulación del gol de Giresse, el partido se reanudó, Maxime Bossis marcó el 4 a 1 final y el equipo francés se metió en la siguiente fase de la Copa del Mundo España 1982. Esta errónea decisión del juez principal provocó que el árbitro soviético nunca más pudiera dirigir un partido internacional en su vida.
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