Indagamos sobre las actividades que realizó el club para ayudar al barrio durante la pandemia.
Por Alejo Serafino
Históricamente Boca Juniors y el barrio de La Boca han mantenido un vínculo muy estrecho. Tan cercano como pocos clubes frecuentan tener. Basta con conocer las inmediaciones del estadio para poder constatarlo. El azul y amarillo desbordan por las calles. Murales, carteles, hasta casas pintadas con los colores de la camiseta. Yendo aún más profundo, el apodo “Xeneize” es consecuencia de la gran cantidad de inmigrantes oriundos de Génova que llegaron y se instalaron en La Boca a principio de 1870.
El barrio ubicado al sur de la Capital Federal nunca se ha destacado por ser una zona de gran jerarquía económica. Lejos está ser un lugar al que se lo relaciona con la gente adinerada. En consecuencia, el club juega un rol fundamental en el desarrollo del barrio.
Escuelas de fútbol, comedores, convenios, son algunos de los lazos más importantes que se generan entre la institución y los vecinos.
Actualmente, Boca Juniors cuenta con 233.000 socios, siendo así, el tercer club del mundo con más asociados, y muchísimos de esos, son vecinos del barrio. Por consecuencia, es necesario y hasta indispensable el compromiso social con los más necesitados.
Si la situación del país en marzo ya no era la mejor, sin dudas la pandemia ha arrasado y perjudicado a los más vulnerables económicamente, y en el barrio boquense, no fue la excepción.
Pocos lugares se alimentan más del turismo que La Boca. Basta con ir a un lunes por la tarde, o un sábado por la mañana para comprobarlo. Por consecuencia, con los impedimentos a las aperturas, y las pocas posibilidades laborales, sobrevivir se ha tornado una odisea.
Es allí, cuando el club tiene que actuar y generar proyectos para ayudar a los más carenciados. Durante los últimos meses, más allá de que su Presidente Jorge Amor Ameal haya hecho público que las instalaciones de Boca Juniors estaban a disposición del gobierno en caso de que se las necesitara, no se han dado a conocer si existieron grandes eventos, o movimientos por parte del club.
Si bien no se han concretado grandes acciones –que al menos la sociedad conozca- hay ciertas movilizaciones por parte de varios departamentos del club que han ayudado a los que más lo necesitan. Quienes administran algunas filiales han organizado ollas populares. También, el departamento de marketing ha repartido barbijos a cada uno de sus socios. A esto, se le suma que algunos jugadores del plantel profesional han ayudado en los distintos comedores.
Debido al poco movimiento que ha demostrado el club en estos últimos meses, fueron los propios socios quienes se manifestaron en contra de los gobernantes de turno y les exigieron que generen planes para beneficiar a los mas que más lo necesitan, ya que el barrio es parte de la institución y Boca, tiene la obligación de al menos, hacer el intento de ayudar.
Como los directivos no han hecho un comunicado oficial con respecto a estas situaciones, Santiago Japas, asambleísta y socio parte del departamento de socios del club, manifestó muchas de las acciones que la institución había tomado, pero que en su mayoría, no se habían hecho públicas. Contó: “Sabemos lo que es el barrio de La Boca, y las necesidades que tiene. La fundación de Boca Social ha repartido 8.000 kilos de alimentos en más de 40 comedores, en una situación así, es difícil generar una donación de este calibre. La pandemia también ha golpeado a los clubes, y Boca, por más que no pase necesidades, no es la excepción”. Además, compartió que se generaron distintas colectas de juguetes en el día del niño para abastecer a las familias. También agregó que ‘’Boca hizo un acuerdo histórico durante la pandemia. En un convenio con la marca Mccain nos han donado dos toneladas de papas para repartir en el barrio de La Boca, y el único costo era publicar su marca en las redes sociales”.
Indudablemente la gran cantidad de acciones no se han hecho públicas, en otras, faltó comunicación del club. Lo cierto es que el Xeneize ha colaborado con los más carenciados y ha cumplido con el rol social que se le demanda, pese a que los mismos integrantes de la comisión directiva, admiten que continúan en la generación de proyectos.
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