El club está fuerte con sus hinchas y en contra de las SAD porque de lunes a sábados ofrece actividades de todo tipo y hasta cuenta con una institución educativa al lado del predio deportivo. Con los posibles cambios del Gobierno actual se podría perjudicar a todos quienes encuentran en el granate un espacio de unión, deporte y cultura.
El 24 de mayo de 1992, el Club Atlético Lanús se consagró campeón del Torneo Nacional B y logró el ascenso a Primera División de la mano de Miguel Ángel Russo. Desde aquella consagración, en el viejo estadio de tablones, el granate se ha mantenido 32 años seguidos en la máxima categoría del fútbol argentino.
No obstante, durante tres décadas, el crecimiento de la institución ha sido notable. No solamente por los títulos conseguidos sino por las actividades sociales, culturales y educativas que se realizan en el club. De lunes a sábados, el club cuenta con una gran variedad de actividades para personas de todas las edades; la oferta cultural y social incluye ajedrez, yoga, danzas, educación plástica, tango y coros.
“En el club colaboramos todos y no ganamos un mango”, aseguró Juan Carlos Cascardo, Tesorero del área de Cultura. Cascardo estuvo a cargo del área de handball y fue presidente del gimnasio hasta que ingresó en el área de Cultura donde trabaja desde hace 21 años por amor al club.
La sede social del club pudo recuperar la participación del socio después de que la pandemia lo obligara a suspender las actividades a puertas cerradas y optar por deportes al aire libre en el Complejo Polideportivo Lorenzo Francisco D’Angelo ubicado en las inmediaciones del Estadio La Fortaleza Nestor Díaz Pérez.
Actualmente, el club cuenta con 35.000 socios de los cuales cientos participan de las distintas actividades culturales. Al respecto, Cascardo afirmó que al club asisten hinchas de todos los clubes, por cercanía o conveniencia y que “a todos se los trata por igual”. Y, aclaró: “Lo único que se les prohíbe es el ingreso con indumentarias de otras instituciones”.
El crecimiento del club también se ve reflejado en el complejo educativo que se encuentra cerca del estadio y cuenta con un Jardín de Infantes, los niveles de Educación Primaria y Secundaria con doble escolaridad, y un Profesorado de Educación Física.
A partir del DNU que presentó el Presidente de la Nación, Javier Milei, donde se habilita a los clubes a dejar de ser una asociación civil sin fines de lucro y convertirse en una Sociedad Anónima Deportiva (SAD), y a raíz de la reciente reglamentación que establece un plazo de un año para que la Asociación de Fútbol Argentino (AFA) modifique el estatuto, el Club Atlético Lanús plantó su postura y se dispuso a luchar contra esta medida.
“El club forma parte del foro social que se creó hace varios años. En la época que (Mauricio) Macri lo había presentado en AFA como una propuesta, perdió en la votación por unanimidad”, afirmó Silvia Salcedo, Presidenta del área de Cultura de Lanús, y agregó que el objetivo es “defender la esencia del club social”, cuya postura siempre fue firme e histórica en contra de las SAD. Cascardo, por su parte, se sumó a estas palabras y aseguró: “Tanto las presidencias de Nicolás Russo, Alejandro Marón y actualmente de Luis Chebel siempre rechazaron indeclinablemente esa posibilidad”.
En relación con la opinión de muchos hinchas del granate, a quienes definen como “socios de teclado“, para la presidenta del área de Cultura de Lanús, estos hinchas no conocen realmente el club y solo se limitan a despotricar contra los resultados deportivos y contra la dirigencia. Además, fue determinante: “Muchos de esos socios son jóvenes que todo lo que conocen sobre el club es a través de las redes y no porque lo hayan vivido o se lo hayan contado”.
En el Club Atlético Lanús existe la idea generalizada de que la inversión privada es la solución para todos los clubes de fútbol del país. “Mucha gente cree que una Sociedad Anónima va a traer dinero, que va a traer a los mejores jugadores del mundo y que vamos a salir campeones todos los años. Es una ilusión que yo no entiendo en qué cabeza les puede caber y además no van a tener derecho ni participación”, expresó Salcedo y continuó: “Si ahora consideran que no somos democráticos, imaginate con un empresario a cargo”.
La implementación de las SAD, para Cascardo, significa “el cierre de muchas actividades sociales y culturales que no son las principales fuentes de ingreso del club”. Es decir, que no son negocio pero que definitivamente hacen al rol social y a la identidad histórica del Club Atlético Lanús. Por tanto, fue contundente con su negativa a los cambios que quiere imponer este nuevo Gobierno nacional.
*Estudiante de la carrera de Periodismo Deportivo a distancia.
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